Una ceremonia fúnebre, collares con cenizas y un adiós lleno de dolor. Lo que parecía el cierre de un capítulo trágico para una familia en Nueva York, se convirtió en un escándalo de dimensiones humanas y legales. Shanice Crews, desaparecida desde 2021, fue declarada muerta, cremada… y luego vista con vida.

La historia parece salida de una película de suspenso, pero ocurrió en la vida real. En julio de 2021, la familia de Shanice Crews, una joven de 28 años, reportó su desaparición en la ciudad de Rochester, Nueva York. Durante casi tres años, no supieron nada de ella, hasta que en abril de 2024, la policía les informó que se habían encontrado restos humanos, los cuales según las autoridades coincidían con Shanice.

La Oficina del Médico Forense del Condado de Monroe respaldó la versión: la causa de muerte fue una sobredosis de cocaína, y aunque el cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición, la identificación fue considerada “confirmada”. A falta de posibilidad para hacer un reconocimiento visual, el cuerpo fue incinerado, y la familia realizó una ceremonia íntima para despedirla.

Pero el verdadero shock apenas comenzaba.

“Tu hermana no está muerta”

En noviembre de 2024, la hermana de Shanice, Shanita Hopkins, recibió un mensaje que puso su mundo de cabeza. Una mujer le escribió preocupada:

"Señora, estoy preocupada. Su hermana no está muerta. Hoy mismo fue voluntaria en mi evento", decía el texto acompañado por una fotografía reciente de la joven.

Desconcertada, Hopkins se contactó inmediatamente con la Oficina del Médico Forense, la misma que le había asegurado que los restos pertenecían a Shanice. A pesar de la fotografía y el testimonio, la institución insistió en que los registros dentales coincidían con los restos cremados.

Presionados por la familia, el caso fue reabierto y se solicitó una prueba de ADN. Los resultados fueron devastadores para la credibilidad del sistema forense: no hubo coincidencia genética.

El cuerpo que habían cremado no era Shanice Crews.

"Vivimos el luto, lloramos, hicimos collares con sus cenizas, las mezclamos con las de nuestra madre. Ahora sabemos que esas cenizas no eran de Shanice. Es una pesadilla", declaró Hopkins.

La Oficina del Médico Forense emitió un comunicado en el que defendió sus procedimientos, argumentando que utilizan métodos científicos estándar y que no pueden comentar sobre casos específicos debido a restricciones legales. Sin embargo, se ofrecieron a reembolsar los gastos del funeral y la cremación.

La familia, lejos de conformarse, planea emprender acciones legales por el grave error. “Siento que no sabían quién era esa persona y querían cerrar el caso de una desaparecida. Es indignante”, declaró Hopkins, aún conmocionada por la confusión.

A pesar de todo, Shanice Crews no ha restablecido contacto con su familia. La fotografía confirmó que está viva, pero permanece en silencio. Fue vista en Detroit, Michigan, donde el Departamento de Policía ha sido informado.

Su hermana, entre lágrimas, cerró la entrevista con un mensaje directo:

"La amo. Estoy enojada y no sé si se me pasará, pero quiero que sepa que, pase lo que pase, la amo. Eso es todo lo que importa."

Para su familia, Shanice sigue desaparecida, pero con la esperanza renovada de que algún día vuelva a casa… viva.

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