Un tenso y alarmante episodio marcó el inicio del esperado derbi entre el Espanyol y el Barcelona, luego de que un atropello masivo interrumpió la previa del encuentro y generara momentos de confusión y pánico entre los asistentes al RCDE Stadium.

El incidente tuvo lugar poco antes del arranque del partido, en una de las zonas exteriores más transitadas del estadio, donde se aglomeraban cientos de aficionados en espera del inicio del clásico catalán correspondiente a LaLiga.

Según informaron los servicios de megafonía dentro del recinto, un vehículo perdió el control y embistió a un grupo de personas que se encontraban cerca de los accesos principales. En cuestión de segundos, el ambiente de fiesta se transformó en conmoción.

Los primeros reportes indican que entre siete y ocho personas resultaron con lesiones, aunque afortunadamente se trataría de heridas leves, según fuentes cercanas a los servicios de emergencia.

De inmediato, los Mossos d’Esquadra desplegaron un operativo en la zona, acordonando el área y evacuando a los afectados. El conductor del vehículo permaneció en el lugar y, según declaraciones iniciales, el atropello habría sido un accidente sin intención deliberada.

“Todo indica que se trató de una pérdida de control del vehículo por causas aún bajo investigación”, confirmaron portavoces de la policía autonómica.

Dentro del estadio, la incertidumbre también se hizo sentir. A tan solo diez minutos del inicio del encuentro, el árbitro César Soto Grado decidió interrumpir el juego. Tras conversar con los capitanes de ambos equipos y recibir el parte policial, el árbitro determinó que el partido podía continuar.

La pausa breve permitió que se corroborara que no existía riesgo inmediato ni para los jugadores ni para los asistentes en las gradas, y así se reanudó el derbi con normalidad.

Las imágenes mostraron un panorama preocupante: ambulancias llegando al lugar, personal de seguridad auxiliando a los heridos y testigos en estado de shock.

Por ahora, las autoridades iniciaron una investigación para determinar con precisión las causas del accidente. No se descarta ninguna hipótesis, aunque todo apunta a que el conductor habría perdido el dominio del vehículo por un fallo mecánico o una distracción al volante.

Este suceso reaviva el debate sobre la seguridad perimetral en eventos deportivos de gran convocatoria, como lo es el derbi catalán, que reúne a miles de personas en un mismo punto de la ciudad.

Mientras se espera un comunicado oficial por parte del club y de las autoridades locales, la jornada deportiva quedó marcada por este inesperado y lamentable incidente. Aunque el juego pudo continuar, el recuerdo del caos inicial permanece en la memoria de quienes vivieron el susto en primera persona.