AMBIENTE POLÍTICO… Capirotada política
Por: Eduardo Serrano
Sí, es legal. Sí, podría se oportuno. La pregunta ahora es saber, qué tan rentable es hacer una capirotada con los partidos opositores al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), con la finalidad de cerrarle el paso en el 2021, y mermarle fuerza en la Cámara Baja y en los Congresos Locales. Hacer una mezcolanza entre el PRI, el PAN, el PRD y el MC, tal vez resultaría contraproducente, puesto que no todas las alianzas suman, pero tampoco, todos los ataques restan. El Ambiente Político pone sobre la mesa a los ingredientes de una posible coalición, que deberá analizarse con gran detenimiento, para definir las porciones precisas que logren servir al deleite del electorado, pues queda claro que la base de la capirotada política sería el PAN, por ser la primera fuerza electoral, pero la presencia del tricolor es innegable, por lo que su sabor debe sentirse en el paladar de las boletas; además, el toque del Sol Azteca y del Movimiento Naranja, no podría pasar desapercibidos, ya que son como el coco, las pasas y la leche, por lo tanto, se debe cuidar que no empalague, ni que se pasen de mala leche.
Cada partido político tiene su potencial, así como su propia problemática interna que deberá, si bien no resolverse del todo, cuando menos apaciguarla, con la intención de que se logre generar una mezcla homogénea, que no se perciba tan amorfa. Vero Pérez, en el blanquiazul, tiene al interior varios grupos que deberán sentirse incluidos en el acomodo de las negociaciones, colocando cada rebanada de tal forma que los mejores perfiles sean la base primordial de un solo PAN, con el anclaje de las y los que busquen las diputaciones federales y el acompañamiento de las y los que competirán por las diputaciones locales. Si el Revolucionario Institucional presenta sus cartas más fuertes, la negociación con Luis Enrique Benítez deberá llevarse con total madurez política, pues será muy difícil para la eventual alianza, ganar en las urnas, a partir de una derrota en la mesa de las negociaciones.
Con el PRD no se trata de sumar enormes cantidades de votos, ni de continuar con la discusión estéril de “juntar el agua y el aceite”, pues el debate ideológico se acaba cuando ellos mismos hablan de “unirse en las coincidencias”. El objetivo es capitalizar los perfiles que Miguel Ángel Lazalde tiene en el partido de izquierda, en los municipios y distritos donde hay una presencia sustantiva, en una mezcla que ha estado probada y que en términos electorales ha resultado favorable, quizás más para el PRD que para el PAN, si de “supervivencia” se trata, pero, ¿Qué sería de la capirotada sin las pasas, las colaciones, y ese toque de azúcar que les evita la amargura? Más vale mantener ciertos equilibrios partidistas frente el coqueteo de la Cuarta Transformación, que, dicho sea de paso, traen su propia receta para la capirotada, pero con abundante “piloncillo” y dicen, que por el momento todo pinta muy dulce.
Una eventual alianza con el Movimiento Ciudadano, sonaría más a reconciliación entre panistas y expanistas que a otra cosa, siempre y cuando se garantice que no habrá ala…digo, mano negra, en las negociaciones, pues al menos entre la coordinación estatal y la municipal, es muy notorio que el oftalmólogo le sigue echando un “ojo” al desempeño de Juan Quiñonez y Ernesto Aguilar, reitero, solo un ojo. Es indudable que el MC tiene perfiles competitivos, aptos para participar en la justa electoral del 2021, pero tendrán que construir su propio capital como partido, pues el principal personaje que tenían, emprendió el vuelo a un horizonte más transformador, por eso Vero, Luis Enrique, Miguel Ángel y Don Juan, deberán analizar con toda sensatez, si en verdad la alianza les favorece a todos, o, ¿Por qué no?, a unos más que a otros, pero convencidos que al final el resultado será positivo, y que la capirotada no les salga “aguada”, porque de ser así, al servirla, solita, a la primera cucharada, se les va desparramar en el plato del elector.
Twitter: @LaloSerranoZ