AMBIENTE POLÍTICO… El discurso opositor
Por: Eduardo Serrano
Los liderazgos dentro de partidos políticos opositores a Palacio Nacional, han batallado mucho para articular un discurso que contraste con la retórica del presidente de la República, quien desde que era candidato, le apostó a la división entre los mexicanos, polarizando el Ambiente Político para verse favorecido por el voto de hartazgo. Los tiempos han cambiado desde aquel 2018, pero ese hartazgo no ha disminuido, por el contrario, se ha acrecentado y se ha desnutrido de esperanza, mientras la mayoría de los políticos opositores no logran reinventarse y reciclan los discursos que los condujeron a la derrota. De hecho, los argumentos para debatirle al pastor cuatroteísta, han corrido primordialmente a cargo de las redes sociales y medios de comunicación, que, aunque le podrán incomodar, no están en la competencia, es decir, no luchan por acceder al poder. Entonces, el más fuerte adversario de AMLO, es él mismo, con sus violaciones y ocurrencias.
Haber reconocido que tiene metidas las manos en el proceso electoral de Nuevo León, donde su candidata, Clara Luz -que es más bien una “mecha apagada”-, mete en serios aprietos a Morena y con ello, al proyecto transformador del presidente, puesto que fue él quien hizo el llamado a los mandatarios estatales a no intervenir en las elecciones, y al ver que Samuel García, de Movimiento Ciudadano y Adrián de la Garza de la coalición PRI-PRD, son los que se disputan el liderato en la contienda, cual niño berrinchudo de las costas de Tabasco, el que se negó a habitar Los Pinos y prefirió la humildad de un Palacio Nacional -nótese el sarcasmo-, pataleó “su balón” a través de la Fiscalía General de la República, rompiendo el cristal de nuestra frágil democracia. El que juró guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, no admite nada que esté en su contra, incluyendo la Carta Magna; mientras tanto, algunos líderes opositores, se sacian a más no poder, del tradicional dulce de Puebla.
Para fortuna de militantes y simpatizantes de la oposición, hay algunos candidatos a diputados federales que sí han logrado articular un discurso adecuado para enfrentar la cantaleta cuatroteísta, como Javier Castrellón, Luly Martínez, Gina Campuzano y Martín Vivanco, atendiendo temas prioritarios en materia de empleo, desarrollo económico, fortalecimiento del campo y recuperación de programas sociales que desapareció el actual Gobierno Federal. En lo local, Alejandro Mojica, Ricardo Pacheco, Martha Palencia, Hugo Rosales Badillo, Londres Botello, Gaby Hernández, Paulina Monreal, Paty Jiménez, Alan González, Vero Fragoso, Pancholín Quiñones y Ricardo López Pescador, en su mayoría, han coincidido en temas de apoyos a emprendedores, reactivación económica, educación, salud y seguridad. Para mala fortuna de los morenistas, a excepción de Martha Olivia García, ninguno ha sido capaz de posicionar algo que los identifique; su ingenio solo les da para decir que están con “ya sabes quién”.
Pese a la obviedad de las críticas, Alejandro Moreno Cárdenas, líder nacional del PRI, ha sabido conectar un mensaje opositor interesante entre la militancia tricolor, que despierta el ánimo de reconstrucción de su partido. Su visita a Durango y el respectivo espaldarazo a la dirigencia que encabeza Rubén Escajeda, además de su cercanía con otros actores como su amigo Arturo Yañez, Esteban Villegas, Roberto Padilla, Ismael Hernández Deras, Luly Martínez y Ricardo Pacheco, entre otros, fortalece el discurso opositor de candidatos y partido.
Marko Cortés dirigente blanquiazul, quien también visitó la entidad, deberá reconstruir su discurso, enfocándolo en el reencuentro interno del PAN, para que sus esfuerzos se reflejen en las urnas. Dante Delgado del MC, con toda la experiencia que tiene, deberá pasar de las declaraciones mediáticas, a los hechos sustanciales, a fin de que, una de dos, se aclare que es una oposición real a la 4T, o le quite el antifaz al supuesto discurso opositor, evidenciando un posible acuerdo entre la cúpula guinda y la naranja.
Por: @LaloSerranoZ