AMBIENTE POLÍTICO… Rosario, ¿linchamiento o justicia?
06/08/2019 - Hace 5 años en MéxicoAMBIENTE POLÍTICO… Rosario, ¿linchamiento o justicia?
Por: Eduardo Serrano
Rosario Robles Berlanga, extitular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), en últimas fechas se ha convertido en tendencia en las redes sociales, y no precisamente por su modo de vestir o por su peinado, sino porque es a la única de los funcionarios señalados en la famosa “Estafa Maestra” a quien traen de bajada en la Fiscalía General de la República (FGR). El Ambiente Político se llena de tensión alrededor de la también exjefa de Gobierno del DF -hoy Ciudad de México- porque todo parece indicar que sí van tras de ella, y el principal indicador es que han congelado sus cuentas bancarias y las de Emilio Zebadúa, uno de sus principales operadores.
La embarrada que le han dado a Rosario Robles -o que ella se dio solita- con la investigación periodística en mención, la cual agrupa información comprendida entre los años 2013 y 2016, en la que al menos 11 dependencias del Gobierno federal hicieron convenios con ocho universidades públicas para realizar una serie de servicios, para lo cual las propias universidades subcontrataron a otras empresas que resultaron ilegales, desapareciendo más de tres mil millones de pesos de recursos públicos, ha provocado que aquella defensa elocuente del expresidente Peña Nieto en la que le dijera: “¡Rosario, no te preocupes!”, haya perdido vigencia. Ella asegura que no tiene nada que esconder, por lo que comparecerá ante el juez de control del Reclusorio Sur el 8 de agosto, tal como le fue ordenado, pero, por aquello de las recochinas dudas, envió un escrito al ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar en el que solicita un trato justo e imparcial y de paso, poner freno al linchamiento mediático del cual es objeto.
La exfuncionaria federal argumentó que fue señalada por Animal Político y Mexicanos Contra la Corrupción en la “Estafa Maestra”, sin considerar que ella misma presentó a los autores de la investigación periodística, documentos oficiales del Órgano Interno de Control, en los que se acreditaba que no había irregularidades; sin embargo, desde el momento en el que se colocó su rostro en dicha investigación, sólo ella fue quien se presentó ante los medios de comunicación y ante el Congreso de la Unión, a pesar que se involucraba a más personajes, debido a que fue puesta en riesgo su integridad y la de su hija, Mariana Moguel Robles, quien padeció de violencia política de género, lo que motivó a Rosario a presentarse voluntariamente en 2018 ante la PGR y además solicitar a la Secretaría de la Función Pública (SFP) y a la SHCP, que proporcionaran información de su persona y que omitieran el secreto bancario, puesto que ella nada tenía que ocultar.
Evidentemente en 2018 la protección hacia Rosario venía de lo alto de Los Pinos -lugar en el que ahora sólo los recuerdos quedan-, por eso la SFP señaló que la evolución de su patrimonio era coherente con sus ingresos, mientras que la PGR no había encontrado “milagrosamente” ninguna carpeta de investigación en su contra, aunque la primera denuncia interpuesta por la ASF por la “Estafa Maestra” se dio en 2015 contra la Sedesol, involucrando a las Universidades del Estado de México y de Morelos; en 2017 nuevamente contra la Sedesol y las Universidades de Morelos, Intercultural Estado de México, la Politécnica de Chiapas, la Tecnológica Nezahualcóyotl, la Universidad Politécnica del Sur de Zacatecas y la UJED, entonces, ya con tanta denuncia, tanta investigación, tantos mundos y tanto espacio como dice la canción, ¿no será que el “dichoso” linchamiento, coincide con una acción de justicia?