Por: Eduardo Serrano

Los esfuerzos por unificar a las diferentes corrientes políticas de Morena en Durango, apuntan más para el 2022 que para el 2021, sin embargo, la aduana del proceso electoral en el que se renovará el Congreso del Estado y la Cámara de Diputados, será fundamental para determinar, cuáles perfiles avanzan posiciones en el tablero tomando una “escalera”, y cuáles, descienden al toparse con una “serpiente” en las urnas. Sin candidatos visibles y competitivos todavía, algunos liderazgos morenistas tomaron la decisión de reunirse, una vez más, para lanzar los dados sobre la mesa de negociaciones, y que, al margen de los nombres que se definan para las candidaturas, el partido de la Cuarta Transformación (4T) salga unido, y de ser posible, victorioso en los distritos locales en los que se encuentran mejor posicionados, porque en el tema de los federales, los dados amenazan con caer en una larga serpiente que los podría llevar hasta el fondo del tablero.

La reunión que sostuvieron en Gómez Palacio, Durango, con Marina Vitela de anfitriona, les permite avanzar varias casillas en conjunto, aunque, en lo individual, el efecto no es el mismo. La ruta de la gomezpalatina va en dirección de la candidatura a la gubernatura, para ello requiere que su síndico municipal, Omar Castañeda, se coloque como abanderado del Distrito 02 federal, sin embargo, hay perfiles como Pablo César Aguilar -quien no estuvo en esa reunión-, que pueden dar la batalla, complicándole el objetivo a la alcaldesa, quien además comparte la misma aspiración electoral con el Dr. José Ramón Enríquez, personaje habilidoso en el juego político, que ha sabido aventar dados en Chihuahua y en Durango, a través de sus operadores. El registro de Alejandro Polo y el “Termi” para el 1er distrito local, así como el de Juan Carlos Corral para el 04 federal, es un indicador de que las piezas enriquistas se mueven con cautela, preparando el camino para el siguiente año.

Sandra Amaya, desde su posición al frente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jocopo) del Congreso del Estado, se mantiene como el principal activo femenino del morenismo, además de ser uno de los ejes fundamentales de la unidad en la 4T. Aún no se sabe a ciencia cierta, cuál será el papel que juegue la diputada local en la justa electoral de este año, puesto que al lanzar los dados, invariablemente la sumatoria le indica una escalera hacia el 2022, donde puede pelear por la candidatura a la alcaldía de la capital, prácticamente, sin ningún adversario interno que le “haga mosca”. Caso similar ocurre con Cynthia Hernández, quien desde el cabildo capitalino avanza a paso firme, cuidándose de las serpientes que no faltan en el tablero interno, y enfocándose en una escalera que la podría llevar directamente al Congreso Local, a través de la primera posición en las listas plurinominales.

Iván Gurrola, luego de que al parecer no podrá contender en el Distrito 01 federal, lanzará los dados por el primero local. El Legislador ha sabido formar parte de la unidad morenista y cuenta con el respaldo de Sandra Amaya, Margarita Valdez y Patricia Ortega; sin embargo, la senadora y diputada federal, en la percepción, se ha quedado muy alejadas del 2021 y del 2022 respectivamente, pues cada vez que arrojan los dados, estos inevitablemente las conducen a una serpiente muy distante de Sandra, Marina y José Ramón. Desde luego, todavía falta ver los dados que lancen Gonzalo Yañez y Gerardo Villarreal para sumarle a la elección federal, historia que será muy diferente en lo local, donde el Verde tiene amplias posibilidades de tomar una buena escalera. Por eso, bajo ese esquema de serpientes y escaleras, quedan plenamente identificados los liderazgos de Morena que, por estar adelante, corren mucho, y los que, por estar atrás, se quedarán.

Twitter: @LaloSerranoZ