Por: Eduardo Serrano

En el Cabildo capitalino el peso de las mujeres se ha dejado sentir desde el inicio de la presente administración. Ciertamente en el trienio pasado hubo regidoras que marcaron  agenda por su estilo frontal en los debates, figurando en el Ambiente Político de forma positiva, como Minka Hernández, quien ahora se desempeña como secretaria particular en el Gobierno que encabeza Jorge Salum. Pero también hubo aquellas que pasaron sin pena ni gloria, desaprovechando la gran oportunidad que les otorgó la ciudadanía con un porcentaje de la votación en favor de quienes, en aquel entonces -elecciones de 2016- , contendieron por sus respectivos partidos y coaliciones. Los reflectores estarán dispuestos para quienes, desde su respectiva regiduría, impulsen las tareas de gestión y las demás responsabilidades que han adquirido como servidores públicos, pero inevitablemente dejarán al descubierto a quienes sólo servirán para “calentar el asiento”.

Los caballeros también serán sometidos al escrutinio público, sin embargo, dediquémosle esta entrega del Ambiente Político primero a las damas. Es precisamente en la fracción del PAN donde surgen varias de ellas, por ejemplo, la primera regidora, Rosa María Ascencio, aunque no se le ha visto mucho mediáticamente, ha empezado a involucrarse muy bien en su tareas, entablando reuniones con directores, particularmente en la Dirección de Educación, con su titular Norma Rodríguez, ya que la respectiva comisión la preside Ascencio. En cuanto a la regidora Ana Soto, es poco lo que ha figurado, de hecho ha manejado un perfil modesto, lo cual es sí no es malo, sin embargo deberá estar atenta para marcar agenda con los temas de las comisiones a las que pertenece, tal como lo ha hecho Gaby Vázquez Chacón, quien en su paso por el Instituto Estatal de la Juventud, agarró las tablas necesarias para adoptar “las banderas” que ahora la mantienen muy activa en medios de comunicación y en redes sociales.

La regidora blanquiazul Claudia Hernández Espino, posee una gran experiencia; sabe manejar adecuadamente los medios de comunicación, pero ha preferido potenciar los aspectos de la fracción que coordina Londres Botello, sumándose al esfuerzo de sus compañeras ya mencionadas; sus compañeros regidores Fernando Rocha y Paco González, para ser más eficientes a la hora de cabildear con sus homólogos de MC, donde destaca su coordinadora, Martha Palencia, quien sabe desempeñarse muy bien en estos menesteres con la experiencia adquirida en su trayectoria política, apoyando a los nuevos valores como Paulina Monreal, quien al estrenarse como regidora ha demostrado que fue una decisión acertada de los “naranjas”, partido que todavía espera a que Marisol Carrillo logre avanzar al ritmo de sus compañeras, lo cual no le será muy difícil, puesto que ya trae el bagaje obtenido en el trienio anterior.

Daniela Soto ha logrado en pocos días convertirse en el referente tricolor femenino de la capital. Con el apoyo de su dirigente estatal, Luis Enrique Benítez, la regidora priista ha captado la atención de los medios, argumentando bien su papel opositor, cosa que no ocurre con la maestra Ivonne Barboza, quien a pesar de ser un perfil bien preparado, avanza sólo a partir de las decisiones de su “jefe político”, lo cual le permite a Cynthia Mont Hernández, como única regidora de Morena, también ser la única a quien se le asocie con la «4T», buscando hacer sinergia con directores al margen de su afinidad política, pero defendiendo en todo momento los postulados de AMLO. De esta manera, entre las nueve regidoras, y por supuesto la síndica municipal, Luz María Garibay, en la capital existe una muy buena representación femenina, cuyos perfiles deberán observar el pasado reciente, pues si ya vieron, políticamente hablando, “las barbas” de sus antecesoras “cortar”, es justo que saquen las suyas, a “remojar”.