Por: Eduardo Ortega Solano

Rumbo a la sucesión para la primera magistratura del Estado, en el proceso 2022, mucho se ha hablado, sobre quienes pudieran ser las propuestas de Morena y sus aliados, además de la muy probable coalición que formarán PRI/PAN/PRD.

La selección del candidato de la alianza se torna compleja, por la gran cantidad de aspirantes; tanto los que han expresado abiertamente sus deseos, como los que pudieran estar impedidos de hacerlo, por el cargo que ocupan actualmente. En esta selección la voz que más peso puede tener es la del gobernador Aispuro, pero también deberá ser tomada en cuenta la opinión de los presidentes nacionales y estatales de los partidos, además de los liderazgos de cada uno de los institutos políticos, el proceso de selección se podría convertir en una verdadera “cámara húngara”, los involucrados deberán tener cuidado de no provocar heridas que al final aflojen una pata de la mesa.

En el caso de Morena y sus aliados, es una tarea mucho más sencilla, los aspirantes no superan la media docena y la decisión se tomará de forma unilateral. El presidente, escuchará, hará sondeos, será fundamental la opinión que la gente exprese en las encuestas, pero la decisión la tomara AMLO, aunque tampoco se puede descartar un caballo negro, sobre la premisa que en otras entidades ha quedado de manifiesto que Morena ha podido ganar con cualquier candidato; incluso cuando ha sido sustituida su primera opción o ha sido una mala propuesta, la marca a estado arriba del candidato.

Pero la elección del abanderado es apenas el primer paso, en este proceso no hay nada definido, y es muy probable que el resultado se construya en base a yerros y aciertos. Puede existir una competencia muy cerrada y los votos de partidos que se fueron en solitario en el proceso electoral pasado como: el Partido Verde o Movimiento Ciudadano, ahora podrían ser el fiel de la balanza, el que logre sumarlos a su causa en una alianza formal o de facto, obtendrá una ventaja competitiva.

A pesar que Durango cuenta con 39 municipios, el mayor padrón electoral se encuentra en tres de ellos: Durango Capital, Gómez Palacio y Lerdo, gobernados respectivamente por PAN, Morena y PRI, sería muy complicado que algún candidato pudiera resultar ganador en estos tres municipios, pero es indudable que la influencia que ejercerán los candidatos de las respectivas alcaldías a su abanderado a la gubernatura será fundamental, por lo que resulta definitorio, no solo la propuesta a la primera magistratura sino por quien irán acompañados.

En cada municipio, en mayor o menor medida se replicará el ajetreo para elegir al candidato, solo en la capital, y por paradójico que parezca las definiciones son muy claras. En Morena si es candidata, la opción es Sandra Amaya, uno de los mayores activos de su partido, si se tratara de candidato la movilidad y resultados del actual presidente de la Jugocopo, Iván Gurrola lo presenta como el candidato natural. Para la alianza o el PAN, el candidato que representa la mejor opción es Antonio Ochoa, pieza fundamental en los logros de la alianza en los primeros cinco distritos en el proceso pasado, además de la diputación de Gina Campuzano, y no se puede desestimar sus triunfos electorales personales.

El que se equivoque pierde…

Twitter: @EduardoOrtegaS