Por: Eduardo Ortega Solano

Sin tomar en cuenta el fuego amigo, tan natural dentro del entorno político, las propuestas de candidaturas realizadas por los institutos políticos, son aceptadas de forma efusiva por simpatizantes y correligionarios, de la misma manera que son desacreditadas por adversarios, esto, independientemente de las cualidades o defectos que posean. Este suceso se replica de forma importante en el ámbito ciudadano, siendo preponderantemente con carácter negativo. A pesar que se asegura que ahora el voto será por perfiles, la primera descalificación que sufren es por el partido que los postula, además de aderezarlos con calificativos como: ratero, corrupto, vividor, entre algunas diatribas y epítetos negativos, se pronuncian aun en los casos cuando pudiera existir un desconocimiento total de los candidatos.

Cierto es, que los aspirantes no son “monedita de oro”, pero los ciudadanos estamos prestos a una descalificación, automática y casi de forma irracional. Pedimos “caras nuevas”, pero cuando algún político en ciernes logra una oportunidad, el rechazo es inmediato; ¡a este no lo conocen ni en su casa!, pero sí se privilegia la experiencia; ¡siempre son los mismos… quieren continuar pegados a la ubre! Hoy los partidos deberían ser muy cuidadosos con la presentación de cada una de sus cartas, la inclusión de una desafortunada propuesta, puede ser capaz de generar una corriente adversa para todo un partido o una coalición, siendo infinitamente menos probable encontrar un personaje que pudiera ocasionar lo contrario.

En nuestra entidad federativa no se han terminado de definir las candidaturas locales, pudiendo arribar perfiles jóvenes, pero con suficientes tablas como son Minka Hernández y Alejandro Mojica por el PAN. En el PRI: Gaby Hernández diputada del D15, buscará reelegirse ahora por el 4D; también los Ricardos, Pacheco Rodríguez y López Pescador, buscarán los D2 y 6D respectivamente, ambos gozan de amplia trayectoria en el ámbito político y legislativo. Del Partido Verde se pudiera ver a su propio dirigente Gerardo Villareal, quien buscaría arribar al Congreso local por tercera ocasión, que “huelga decir” ha realizado un buen papel; de este instituto también se pudieran ver a Verónica Fragoso y Pancho Franco. De Movimiento Ciudadano la única que da identidad a este partido es Paulina Monreal, ya que sus cuadros más noveles independientemente de su valía no son identificados como huestes de MC, aunque también se ve a María Martha Palencia, que, aunque ha estado ausente tiene todos los méritos para participar. En el caso de Morena han sido muy herméticos en sus propuestas, pero sin duda veremos buscando una posición a la regidora Cinthia Montserrat, quien ha destacado por su trabajo en Cabildo; por este partido buscará el 3D Jorge Silverio Álvarez, aseguran los que lo conocen que es hombre honesto y de convicciones.

Por supuesto que de los antes mencionados, no están todos los que son… ni son todos los que están, pero en mayor o menor grado, todos, tienen cierta presencia; y de no ser así, de ninguno pudiera considerarse, que gozan de un rechazo social o tengan carácter de impresentable, eso no está sucediendo en Durango, pero sí, en otras entidades, y en las oligarquías partidistas.

Como es posible que Morena postule como candidato a gobernador de Guerrero a Félix Salgado Macedonio, sobre el que pesan tres acusaciones de violación. Pero no solo este tipo de cosas indignan a la ciudadanía, nuevamente veremos Gracias al PRI y vía plurinominal en la cámara baja a “Rubén Moreira y señora”, a testaferros de los Murat, al junior de Gamboa Patrón, y por el PAN aparecen en un lugar privilegiado: Margarita Zavala, Santiago Creel, Cecilia Romero, y hasta Gabriel Quadri. Seguramente el PRD no contará con mejores propuestas.

Mientras en algunas entidades se tratan de hacer las cosas bien… las cúpulas continúan con prácticas de nepotismo, impunidad y corrupción, gatopardismo puro.

Twitter: @EduardoOrtegaS