Autopista
Por: Emmanuel Salazar
El cierre del sexenio del gobernador José Aispuro Torres, puede aún permitir una obra emblema y todo depende de qué tanto pueda el ejecutivo y su equipo logren concretar una autopista de 78 kilómetros entre Cuencamé y los límites con Zacatecas.
La obra que es promovida en un sitio desarrollado por Banobras y la Secretaria de Hacienda y Crédito Público es sin duda un proyecto con mucho futuro pues solo hay que transitar el tramo de Cuencamé a Zacatecas para darse cuenta que es un “cuello de botella”, pues ahí solo hay una vieja carretera a contrasentido que provoca accidentes y pérdida de tiempo.
Ante el Congreso del Estado, el Gobernador Aispuro Torres anticipó que enviará una iniciativa para solicitar una autorización de una Asociación Público Privada, misma que no representaría inversión alguna para el estado pues el peaje pagaría el costo.
A diferencia de la Asociación Público Privada del alumbrado público, aquí si se ve que la obra misma puede autofinanciar su costo, pues, como lo he dicho, en ese tramo carretero hay una fuerte carga vehicular, sobre todo de tracto camiones lo que implica que, si habría de donde financiar la obra que sería ejecutada con recursos de la iniciativa privada que se quedaría con una concesión por 30 años, según los datos del sitio web desarrollado por Banobras.
Esa sería la primera autopista construida en Durango luego de que en 2013 se entregó la supercarretera Durango-Mazatlán, y requeriría una inversión de solo mil 800 millones de pesos, nada que ver con la inversión de más de 25 mil millones de pesos que en su momento costó la vía de cuota al puerto sinaloense.
El anuncio de la nueva autopista lo hizo el Gobernador en el marco de su IV informe de Gobierno que sorprende por los datos que se llegan a manejar pero que ha tenido el gran obstáculo de la socialización de los datos, un área de oportunidad existente desde prácticamente el arranque de la actual administración.
Se ve difícil que en los últimos dos años de la administración del Gobernador se pueda contar con respaldo federal para ejecutar obras como la presa Tunal II, o bien que se le pueda respaldar a la zona del centro sur del estado con algo que pueda estimular la economía.
Seguramente en la región lagunera se invertirán en el sexenio presidencial quizá hasta 11 mil millones de pesos, pero eso solo beneficiará más a la iniciativa privada de Torreón, Coahuila que al territorio duranguense.
Comentarios: @jemmanuelsr