Por: Fatima Salazar

«Las redes sociales le dan el derecho de hablar a legiones de idiotas que antes hablaban sólo en el bar después de un vaso de vino, sin dañar a la comunidad. Entonces eran rápidamente silenciados, pero ahora tienen el mismo derecho a hablar que un Premio Nobel. Es la invasión de los imbéciles». Umberto Eco al diario “La Stampa”.

Todo es hablar del virus que puso en jaque al mundo, COVID-19, la que se pasó de irracional en este sentido, es aquella sobre la supuesta conspiración al Gobierno federal, ¿en verdad creen eso? Lo que considero que sí está sucediendo de forma paralela, es ese salto urgente a la total era digital, en muchos aspectos, pese a que nos resistimos en algunos temas. Hoy más que nunca, la digitalización saca adelante, con esa distancia saludable, para poder continuar varias acciones desde casa. Hablaré del tema educativo y comunicativo.

México es de los países que más ha tardado en materia de medidas preventivas emanadas de Gobierno para evitar la rápida propagación del virus, en otros puntos del mundo como España se hicieron a tiempo en fase preventiva pero no se respetaron, hoy vemos videos en redes sociales advirtiendo a otros países que acaten las medidas y tomen con seriedad el Coronavirus.

En materia de comunicación gubernamental a nivel local, son varios retos que han sorteado al paso las áreas encargadas, los próximos días son cruciales para evitar la propagación, incluyendo las ruedas de prensa y eventos políticos. Imprescindible se haga uso de las redes sociales, comunicados grabados y todo tipo de apoyo en plataforma digital, tanto para auxiliar al reportero que de todas formas debe informar, como mantener un canal permanente con la ciudadanía. Gran ejemplo ha dado la Arquidiócesis de Durango en su página de Facebook.

Y por favor, si no tiene nada bueno qué informar, no exponga al político. Este virus, pese a lo que pueda creer AMLO, no distingue cargos, recurso ni ideología. Al reunir trabajadores de medios de comunicación para no decir nada, arriesga a todos.

He visto que entrenadores deportivos se quejan de no tener un salario en estos momentos, puesto que la cuarentena afecta directamente a este sector, todos en colaboración podemos salir adelante, graben rutinas, créanme que sí ayudan, es incluso sano el mantenerse activo.

Recuerdo, hace dos años un proyecto ambicioso en el Colegio de Bachilleres, dotar de una tablet a todo alumno, al principio la inversión fue fuerte, después era cuestión de mantenimientos. Hoy recordé al exdirector Pepe Ramírez con esa idea, sería muy útil en estos momentos.

En colegios particulares se deja diario las páginas que deben avanzar y se debe enviar la foto para que el maestro, desde su casa, revise que esté hecho. Es una buena medida, así los alumnos hacen lo que el Gobernador reiteró en varias ocasiones, mantenerse aprendiendo desde casa, no vacacionar. Sin duda, este virus viene a enseñarnos formas distintas de hacer las cosas, quitar la demagogia y avanzar, sé que hay trabajos que simplemente es imposible, pero los que sí pueden avanzar desde casa, ya quitan esa presión en el exterior, hay que recordar la distancia y evitar aglomeraciones.

Es un buen espacio de tiempo para recapitular en lo que se ha hecho, como el Gobierno municipal que lleva seis meses de nueva administración y poder enlistar los pendientes abordados en campaña. O en caso del estatal con tres años y medio de aprendizajes, palomeen aquellas acciones que harán que se recuerde su paso por las arcas estatales.

La política es debate, no pleito de borrachos. Si hace uso de sus redes sociales, hágalo del lado positivo. Así nos será más ameno el encierro.

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