Día del abogado
Por: José Luis López Ibáñez
Amados por unos, odiados por otros, pero necesarios para todos; bien es sabido, que para salir bien librado de cualquier apuro legal es indispensable contar con un abogado; profesionistas que realizan investigaciones de los problemas en la procuración y administración de la justicia o en la aplicación de la Ley proponiendo formas de superarlos, que asesoran o representan a particulares, empresas o gobiernos en asuntos jurídicos en los tribunales competentes con conocimiento y fundamento en la Ley.
La profesión de abogado es muy antigua en el mundo; ya que siempre han existido circunstancias que dan como resultado actos de injusticia, que hacen necesaria la defensa a cargo de un profesional del derecho. También han existido personas con el talento, elocuencia y la argumentación jurídica para ostentarse como defensores de las causas justas, que posteriormente se convirtieron en abogados.
Este domingo 12 de Julio se cumplen 60 años de celebrar al abogado en México; la historia de esta celebración data de 1960 cuando por petición del periódico el Diario de México de la capital del país, el presidente de la República, Adolfo López Mateos, declaró Día del Abogado.
Pero su historia va más allá, considerando que el comité encabezado por Federico Bracamontes, fundador de Grupo Diario de México solo retomó el 12 de julio para festejar a los abogados, a partir de la conmemoración de dos sucesos de relevante trascendencia en la enseñanza del Derecho en nuestro país, recordando por un lado que precisamente un 12 de julio de 1533 se estableció en la Nueva España la primera cátedra para la enseñanza del Derecho y se dictaron las primeras Ordenanzas de Buen Gobierno.
Suceso que trajo como consecuencia que Carlos V, por cédula expedida el 21 de septiembre de 1551, ordenara el establecimiento de un estudio de Universidad de las Ciencias, inaugurándose en consecuencia la Real y Pontificia Universidad de México el 25 de enero de 1553. Con tal suceso, las facultades que dieron inicio a la historia de la educación superior en nuestro país, fueron las de Cánones y la de Leyes.
Así mismo, el 12 de julio de 1553 Bartolomé de Frías y Albornoz leyó ante testigos de importancia la Prima de Leyes; siendo ésta una de las cátedras que había en ese tiempo y se impartía en Derecho, en la que se enseñaba el Digesto; Código, en el que se enseñaba el Corpus Juris Civile, e Instituta, en la que se introducía al alumno en los principios fundamentales del Derecho Romano, así se ubica este día como la fecha de la primera cátedra de derecho en América Latina.
En sus inicios la carrera de Leyes, impartida por la Real y Pontificia Universidad de México, comprendía de cinco años de Prima y Vísperas de Derecho y dos cursos más de un año de Jurisprudencia Civil, en el que se daba las herramientas necesarias a los futuros abogados, para hacer recta observancia de la aplicación de la justicia.
En esa época virreinal, los abogados empleaban una vestimenta específica que los distinguía; la cual constaba de traje negro, con calzón corto, zapatos con hebilla de oro o plata (según la posición económica) y la tradicional e indispensable toga.
Después de la independencia y acorde a los tiempos de cambio, el abogado se desprendió de la solemnidad que lo había caracterizado, despojándose de la toga para convertirse en un republicano hombre de Ley.
El Día del Abogado se celebra todos los años a manera de recordatorio de los deberes que los mexicanos tenemos para con la aplicación de las Leyes y la justicia, uniendo aún más el gremio de la abogacía, con el único fin de servir como motor de cambio y desarrollo social.
Durante la primera celebración, en 1960, en representación de López Mateos, el entonces Procurador General de Justicia del Distrito y Territorios Federales, Fernando Román Lugo, declaró instituido el Día del Abogado.
Para el festejo de 1961, el Presidente recibió de manos de Federico Bracamontes el galardón “La Cruz de Honor a la Dignidad Profesional”, otorgada por el Comité Fundador del Día del Abogado, en reconocimiento a su carrera en las Leyes y la instauración de este festejo.
A partir de esta celebración, los mandatarios posteriores: Gustavo Díaz Ordaz, Luis Echeverría Álvarez, José López Portillo, Miguel de la Madrid Hurtado, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, han sido invitados de honor a esta festividad.
Es importante señalar que en México el día 12 de julio se celebra el Día del Abogado, pero no es una festividad exclusiva de este país. En Guatemala se celebra el 24 de septiembre; en Argentina se lleva a cabo el 29 de agosto; en Ecuador el 20 de febrero; Venezuela y Colombia el 23 de junio.
En estos tiempos de pandemia los abogados litigantes están atravesando una situación económica muy complicada, debido a que los órganos encargados de administrar la justicia en los ámbitos federal y local, se encuentran en receso debido a la cuarentena, espero que en los próximos días reanuden sus actividades.
Cada día por diversas circunstancias es más complicado el ejercicio de la profesión. Pero en fin es la carrera que elegimos y que ejercemos con mucho orgullo. ¿Usted qué opina amable lector?
¡Feliz Día compañeros abogados!
Twitter: @jlopezibanez