Por: Emmanuel Salazar

La inminente parálisis económica pondrá a prueba a nuestra sociedad y provocará una crisis de la cual podremos ver lo mejor y lo no tan bueno de nuestra sociedad en tan solo unos días. En las siguientes dos semanas se espera estalle la crecida de los contagios del COVID-19, y seguramente en nuestro Durango habremos de vivir la problemática que hasta ahora observamos en los medios internacionales, tan lejos, pero también tan cerca.

Y para no ir tan lejos, en Monclova observamos un escenario grave, en donde una cantidad importante de médicos resultaron contagiados a partir de un paciente.

En nuestro estado, 26 personas que laboran en el sector salud están bajo aislamiento para permitir observar y descartar un eventual contagio que podría haber ocurrido justamente cuando atendieron a ciudadanos que posteriormente dieron positivo al Coronavirus.

El gran reto sigue siendo cómo persuadir a la sociedad para lograr su estancia en casa, y así lograr detener el golpe que pueda asestar el virus importado desde Asia. Y mientras logramos convencer a los ciudadanos de quedarse en casa, aún y cuando muchos no pueden por su precaria condición económica, por ser quienes sacan el diario con su desempeño cotidiano, existe alguna cantidad de personas que puede evitar salir, y al menos ese sector debería coadyuvar seriamente.

La crisis que desatará la pandemia en nuestra entidad se resentirá en su oportunidad, y ojalá se pueda responder y se logre aislar los brotes que lleguen a presentar. Y como dijo el Gobernador, José Aispuro Torres, es necesario la unidad, dejar a un lado por las siguientes semanas, las divisiones políticas para poder intentar enfrentar de mejor forma la crisis que desatará el virus.

En nuestras redes sociales hace falta evitar compartir datos que no podamos verificar, debemos pues checar cada mensaje que nos llega antes de darnos a la tarea de exponerlo a nuestros amigos y conocidos. Lo menos que puede hacer uno es poner el mensaje en el buscador y podrá uno revisar que tan acertado y falso resulta el mensaje que nos hacen llegar nuestros contactos, y ojalá lo podamos hacerlo para así evitar fomentar la psicosis.

El estado anímico debe ser fortalecido, pero en la medida de lo posible con datos reales, acompañado de buscar efectivamente la empatía con quienes tenemos al lado para enfrentarlo de la mano con el vecino, el amigo, el familiar, lo que viene.

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