Por: Gilberto Jiménez Carrillo

Felipe Calderón, mejor conocido como “Felipe el oscuro” o “Comandante Borolas”, publicó un twit expresando que el presidente López Obrador puede bajarse el aguinaldo, al fin y al cabo, su esposa ya recibe la beca que da el Conacyt. La sugerencia del gris y mediocre personaje obedeció a dos razones: La primera a que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que después de hacer una consulta al interior del Gobierno, se llegó al consenso de bajar los sueldos y disminuir el aguinaldo de subdirectores, directores, directores generales adjuntos, directores generales, jefes de unidad, subsecretarios, secretarios y del propio titular del Ejecutivo. El segundo motivo de los comentarios del “burro vestido”, se debe que la Dirección Adjunta de Desarrollo Científico Coordinación de Apoyos a Becarios e Investigadores y la Dirección de Vocaciones Científicas y SIN del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), informó que la Doctora Beatriz Gutiérrez Müller formará parte del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) en su nivel 1.

El SNI fue creado por un acuerdo presidencial publicado en el Diario Oficial de la Federación el 26 de julio de 1984. Tiene el fin de reconocer la labor de las personas dedicadas a producir conocimiento científico y tecnológico. El reconocimiento incluye un estímulo económico determinado según el nivel del nombramiento, el cual puede ser I, II, III y emérito. El objetivo fundamental que deben cumplir aquellos que ingresen al SNI consiste en fortalecer la calidad de sus investigaciones en materia científica y de innovación tecnológica. Los miembros del SIN cada tres años son evaluados, y si el investigador no alcanza estándares internacionales, pierde la distinción y, por lo tanto, su beca o ingreso. La producción académica empieza a medirse por el número de artículos en revistas arbitradas (nacionales y extranjeras), libros, capítulos de libros, tesis dirigidas (sobre todo en posgrado), y un largo etcétera. Los mecanismos o requisitos de ingreso consisten en tener como grado mínimo estudios de maestría, ser profesor de tiempo completo, años después el requisito fue el grado de doctor. Actualmente hay una particular tendencia a darle un mayor peso simbólico a los estudios de doctorado en el extranjero. Con ello el valor y el prestigio de pertenecer al SNI es más que evidente, lo mismo que la conducta de quienes pertenecen a éste, lo cual me consta, pues mi hija, la Doctora en Economía egresada del Instituto Politécnico Nacional, Ana Lorena Jiménez Preciado, desde hace un año pertenece al SNI, reconocimiento que le costó mucho esfuerzo y dedicación, no por nada es Jefa del Departamento de Investigación de Economía en el IPN y profesor de asignatura.

Dicho de otra manera, no se pertenece al SNI por dedazo o recomendación. Gutiérrez Müller es maestra en Literatura Hispanoamérica por la Universidad Iberoamericana de Puebla (UIA) y doctora en Teoría Literaria por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Iztapalapa. Asimismo, es investigadora del Instituto de Humanidades y Ciencias Sociales de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y autora de varios libros. Aunque pensándolo bien no tiene caso compartir esta información con “Felipe el oscuro”, que es un “burro vestido” que no rebuzna nomás porque no se sabe la tonada, y como los burros se juntan para rascarse, a ver que jumento le hace segunda a Borolas,.. yo no.

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