Por: Jorge Anima

La «Estafa Maestra» es muy probablemente el mayor fraude comprobado que sale a la luz pública en nuestro país, pues se tiene demostrado que hay un robo del Gobierno encabezado por Enrique peña Nieto y sus secuaces por más de siete mil millones de pesos al erario público del país.

El atraco de los ladrones con careta de funcionarios de Gobierno, o servidores públicos, hacia la nación se realizó principalmente en 2013 y 2014, y en éste participó la ahora convicta Rosario Robles, que en aquel entonces entró a desviar dinero a la Secretaria de Desarrollo Social (Sedesol), Alfredo del Mazo, primo de Peña Nieto y ahora gobernador del Estado de México, y en aquel entonces titular del Banco Nacional de Obras (Banobras), y Emilio Lozoya, cuando dirigió petróleos mexicanos (Pemex), ellos fueron los principales operadores de «La Estafa Maestra», claro que todo esto con autorización del Presidente y Secretaría de Hacienda y Crédito Público, convirtiéndolos en cómplices, así como exgobernadores y rectores de universidades

La Auditoría Superior de la Federación(ASF) reconoce que sí es un fraude, pues en palabras de su titular (en aquel entonces) Juan Manuel Portal, expresa que «es un claro acto de corrupción que involucra  siete mil 670 millones de pesos», pues estos supuestamente le fueron asignados  a 186 empresas, pero 128 de ellas son «fantasma» o legalmente no debían recibir recursos públicos porque no tienen la capacidad para realizar la tarea encomendada, no prestaban los servicios y su verdadero fin era desviar recursos o desaparecerlos, pero con el fin o de robarlos o de meterlos a campañas políticas mediante 21 universidades que simulaban gastarlo.

De manera deplorable, la máxima casa de estudios en Durango, la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), está inmiscuida con 10.5 millones de pesos en el año 2015, a través de contratos con la Secretaría de Agricultura para supervisar programas de esta dependencia.

Los implicados en el fraude de la «Estafa Maestra» en la UJED son coautores y tristemente manchan la imagen de la institución, pues los cómplices de Rosario Robles en Durango son el exgobernador Jorge Herrera Caldera y el exrector de la UJED, Erasmo Návar.

Rosario ya abrió la boca señalando a Peña y a Meade, es decir a sus jefes, y ahora se ve complicado que se guarde algo, que proteja a quien le ayudo en la «Estafa Maestra».

Los mencionados son parte del antiguo régimen que tanto daño nos causó, son parte de la moribunda  forma de hacer política a través de la corrupción.