Por: Quetzal Herrera

Como parte de una política donde deben existir los contrapesos a las decisiones gubernamentales, en nuestro país, desde la creación de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) en el sexenio de Vicente Fox Quesada, este organismo ha llevado una relación de respeto y trabajo institucional con el Presidente de la República en turno, en la actualidad no podría ser la excepción derivado de la pluralidad partidista en todos los estados, por lo que ambas partes son necesarias para crear una verdadera gobernabilidad; y como muestra de ello, desde el inicio del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, gobernadores del PRI y del PAN, principalmente, han sostenido una importante cantidad de acuerdos con el Mandatario, donde hasta cierto punto se han respetado.

Esta semana se dio a conocer que derivado de una reunión entre los miembros de la Conago, determinaron hacer una relación de 32 obras de infraestructura que a su juicio el Ejecutivo Federal debiera impulsar, y que a criterio de los mandatarios de las entidades son necesarias para el desarrollo de sus estados, listado que finalmente fue entregado por el Presidente en funciones de la conferencia, Francisco Domínguez, de Querétaro, quien manifestó que el encuentro con el jefe del Ejecutivo fue productivo y a la vez se mostró confiado en que habrá respuestas positivas.

Y es que derivado de algunas cancelaciones de obras importantes, como lo ocurrido en la Laguna con el metrobús, que conectaría a los estados de Coahuila y Durango a través de los municipios de Matamoros, Torreón, Gómez Palacio y Lerdo, tanto el Gobernador de nuestro estado como Miguel Riquelme Solís, solicitaron que en dicha relación esté considerado la continuación de dicho metrobús, pues ambos mandatarios lo consideran de la mayor importancia para el desarrollo metropolitano de la comarca lagunera, en cuanto a movilidad urbana, lo que representaría también una mejor y mayor presencia de su transporte; por lo que ambos han puesto “sus canicas” a que este proyecto avance.

López Obrador sabe que ante esta solicitud de los gobernadores tendrá que ceder de manera importante, pues conoce de la fuerza que representan en nuestro país, y seguramente tendrá que contar con su respaldo en futuras decisiones, y esto vendría a ser una “moneda de cambio” que a la postre el Presidente canjeará cuando requiera el respaldo de la Conago. Esto es política, y está basada en acuerdos entre ambas partes. Aquí también será fundamental que respalden esta petición los legisladores federales por Durango, que ha decir verdad no se han manifestado al respecto y han hecho mutis ante esta situación.

Ojalá que así como han tomado “el toro por los cuernos” en este asunto, los gobernadores también asuman la misma postura de presión ante otros temas necesarios para las entidades, como lo relacionado al fortalecimiento de la seguridad, ya que no basta con el envío de efectivos pertenecientes a la Guardia Nacional, sino que se presume fundamental el trabajo coordinado; el respaldo a las estancias infantiles y de vital importancia el tema de los recursos de la federación a los estados, mismos que, como en el caso de Durango, no han terminado de bajar, a pesar de que estamos a mitad de año.

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