LA GRILLA DEL PÁJARO… Los cambios en el PRI
Por: Quetzal Herrera
Al concluirse el periodo de la actual dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional, que iniciara Luis Enrique Benítez Ojeda, el día de ayer se llevó a cabo una sesión extraordinaria de la Comisión Política Permanente, del Consejo Político, donde se aprobó por mayoría la emisión de la convocatoria para la renovación de la presidencia y secretaría general de este instituto político, mediante el método de asamblea de consejeros políticos, donde a más tardar para el próximo 26 de agosto deberá quedar definido quiénes estarán al frente, primero, de las negociaciones para consolidar la alianza con el PAN y el PRD, de cara a la elección del 2022, pero también para lograr cohesionar al partido cuando se determine quién será la “carta” propuesta tanto para el Gobierno del estado como para la presidencia municipal, según avancen los acuerdos con los otros partidos.
Y es que no será una tarea sencilla, pues a pesar de haber quedado como segunda fuerza en el pasado proceso electoral, y tener el mayor número de legisladores en la próxima legislatura del Congreso del Estado, el tricolor no ha logrado regresar a sus años “de gloria” con la aceptación de la sociedad, pues hay quienes se han encargado de mantener vigente los escándalos de corrupción que en otros años se dieron y que ocasionaron la caída no solo del PRI, sino también del blanquiazul, quienes hoy, justo por esas circunstancias se han unido para hacerle frente al poder que representa Morena en las urnas, gracias a su “pastor y guía”
Ante estos escenarios han comenzado a surgir los nombres de quienes pudieran llegar a esta dirigencia, y precisamente ayer me confirmaban la versión de que el actual presidente, Rubén Escajeda Jiménez, estaría valorando la posibilidad de participar, pues estatutariamente afirma que no está impedido para hacerlo, y cabe señalar que durante los meses que tomó las “riendas” tricolores, ya avanzado el proceso electoral y desde luego la designación de la alianza y las candidaturas, el oriundo de San Juan del Río logró hacer un trabajo destacado, principalmente en lo referente a fortalecer la unidad de la militancia, pues la escuela del exlegislador federal, la experiencia a su paso por el Comité Ejecutivo Nacional, así como en la CNC, le permitieron imponer su “sello” a un instituto político que poco a poco busca ocupar mayores espacios, por lo que su aspiración a mantenerse en el encargo, con el respaldo de diversos sectores, no puede dejarse de lado.
De igual forma, y con la amistad que une al excandidato a la presidencia municipal, Arturo Yáñez, con el dirigente nacional, Alejandro Moreno, sería otro de los aspirantes que entrarían en la lista a dirigir al PRI en nuestra entidad, pues además de haber sido el delegado en el estado de Zacatecas en la pasada elección, también ha sido el delegado regional, precisamente con la confianza que el originario del estado de Campeche le ha brindado. En este caso me parece que el primer reto, de darse la dirigencia para él, sería el hecho de optimizar el tiempo que tendría para las definiciones en cuanto a las candidaturas y al hecho de formalizar la alianza, Arturo tendría la “bendición” de “Alito” para “tejer fino”, dado que Durango sería de los seis estados donde se renovará el gobierno del estado.
Aún nada está escrito, y seguramente surgirán más aspirantes, lo que es una realidad es que personajes como el exgobernador, Ismael Hernández Deras, también tendrán voz y voto en cuanto a la determinación de esta nueva dirigencia en el estado.
Twitter @Quetzalh