Por: Fhernanda Simental L.

“Debemos promover la cultura porque pocas esperanzas tiene este mundo de tener un futuro mejor sin el auxilio de las actividades culturales”.- Ignacio Solares

Y si lo hacen impunemente en nuestro municipio de Durango, ¿Por qué no iban a hacer a nivel nacional la Cuarta Transformación? Es una práctica por demás conocida y que todos realizan: «El madruguete». En medio del caos y la crisis por la pandemia del Coronavirus, el Gobierno federal que encabeza Andrés Manuel López Obrador, decretó la extinción de Fideicomisos, lo que se traduce en nada más y nada menos, la extinción del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) y Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad (Foprocine), Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine).

Y aunque el jueves en su mañanera Andrés Manuel López Obrador dijo textual: “Se va dar apoyo para la innovación tecnológica pero había mucha dispersión de recurso y María Elena (Álvarez Buylla, directora del Conacyt) dice que con dos de los 62 fideicomisos tenemos. En el caso del arte y la cultura lo mismo, ¿Cómo vamos a dejar sin becas a los creadores? ¡Claro que no!, sí nos importa mucho el fomento a la cultura, a las artes. No somos conservadores. Nada más vamos a buscar el mecanismo para que se entregue. No podíamos expedir un decreto con excepciones, además la Ley de austeridad republicana nos pide extinguir los fideicomiso de todos lados”.

Ante esto, la desaparición del Fonca, el Foprocine y Fidecine, entre muchos otros será inminente. Y sí, Andrés Manuel puede decir que no se desprotegerá a la cultura o a la ciencia y tecnología, pero lo cierto es que a la fecha, las acciones mostraron lo contrario: La cultura y la ciencia y la tecnología no son prioridad para la Cuarta Transformación, que prefiere (también), en medio de la pandemia, comprar un estadio de béisbol por más de 511 millones de pesos, antes que apoyar al sector salud, que es en lógica, el sector que debe ser respaldado con todo para salir de esta crisis sanitaria.

El escritor y académico Ignacio Solares, envió a Andrés Manuel una carta donde habla de la importancia del Fonca y su papel preponderante para incentivar la creación artística en el país. En esa carta que intituló “La violencia es el veneno; la cultura es el antídoto”, Solares le recordó al Presidente una comida que sostuvieron en casa de la actriz María Rojo, donde además se encontraba el escritor Gabriel García Márquez y el exrector de la Uiversidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Juan Ramón de la Fuente, donde hablaron de hacer crecer la cultura en México para que llegara a todo el pueblo.

Ahora, nuevamente Solares retoma lo dicho y pide coherencia al que ahora se sienta en la silla presidencial de Palacio Nacional: “Le dirijo carta tan solo para recordarle esos conceptos suyos y la importancia suprema del Fonca como mecanismo para incentivar la creación en nuestro país, tal como lo platicamos aquella tarde. Le pido recordarlo y considerar la permanencia del Fonca como instrumento fundamental de ese antídoto al que me refiero en el aforismo que escribí en estas mismas páginas”.

No, quizás ni el Fonca, ni el Foprocine ni el Fidecine puedan escaparse del influyentismo, amiguismo, compadrazgos, ni de las rémoras que han hecho de las becas su modus vivendi, pero en un país donde la cultura fue relegada a ser la caja chica de los gobiernos, o la oficina donde se manda a toda la gente que estorba en una administración, las becas y apoyos de fideicomisos son un oasis en un desierto burocrático donde el arte no tiene cabida.

Twitter: @Fher_Turkita