Por: Erick R. Solís Tavizón

Es muy frecuente que, cuando se llevan a cabo procesos al interior de los partidos políticos (precampañas) para elegir candidatos, durante y cuando concluyen los comicios electorales, los actores políticos y sus organizaciones interpongan recursos de impugnación ante la autoridad electoral, argumentando que sus derechos político-electorales han sido violentados. El más común de ellos, es el derecho fundamental de votar y ser votado, y este año no será la excepción. No se necesita ser adivino para saber qué serán un sinnúmero de voces las que se levantarán debido a que no se les tomará en cuenta para participar en la elección más importante de la historia; y cómo no, si derivado de una extraña mezcolanza de colores, ideologías y de grupos antagónicos, se les dará la oportunidad solo a unos cuantos, haciendo a un lado a los que dicen ser merecedores de abanderar la causa, a sus respectivos colores, a sus estructuras y claro, a sus derechos, esos derechos que tutela y protege la Constitución.

Todo ciudadano mexicano tiene el derecho constitucional de votar y a ser votado, así lo establece nuestro Máximo Ordenamiento en su articulo 35, el cual expone en su fracción I, que es un derecho votar en las elecciones populares, mientras que en la fracción II del mismo artículo, establece el derecho a poder ser votado en condiciones de paridad para todos los cargos de elección popular, cumpliendo las calidades que establece la propia Ley.

Votar y ser votado es un derecho político electoral, y para defenderlo, además de la Constitución, existen leyes secundarias y  un sistema impugnativo que contempla la Ley General de Sistemas de Medios de Impugnación en Materia Electoral (LGSMIME), misma que tiene la finalidad de garantizar los principios de constitucionalidad, legalidad de los actos y resoluciones electorales, además, de concluir las distintas etapas de los procesos electorales y de garantizar la protección de los derechos políticos de los ciudadanos de votar, de ser votados y de asociación.

La LGSMIME, en su articulo 79, establece las causales de procedencia, e indica que: “solo se procederá cuando el ciudadano por sí mismo, de forma individual o a través de sus representantes legales, haga valer presuntas violaciones a sus derechos de votar y ser votado en las elecciones populares, de asociarse individual y libremente para tomar parte en forma pacifica en los asuntos políticos y de afiliarse libre e individualmente a los partidos políticos”.

Los juicios para la protección de los derechos políticos electorales del ciudadano están al alcance de todos; además que se encuentran reconocidos tanto a nivel federal como a nivel local, siendo este el medio a través del cual el ciudadano puede acudir a solicitar la protección de sus derechos políticos cuando considere que han sido violados.

El derecho a votar y ser votado es el pilar de toda democracia y hoy mas que nunca requiere ser preservado por todos los ciudadanos sin importar las preferencias ideológicas y partidistas, buscando siempre que solo las mejores mujeres y hombres tengan la oportunidad de competir por los cargos de elección popular y cuando se dice los mejores se habla de aquellos con pleno conocimiento legal, cívico y de pertenencia social que tengan el valor de ejercer sus cargos a favor de la sociedad en general y no simplemente en intereses, que muchas veces resultan ajenos a los ciudadanos, nuestro país necesita funcionarios y representantes sociales que sean realmente útiles, que vayan y trabajen por el bienestar social y que no piensen solo en el cargo de elección popular inmediato o en la reelección del mismo, es decir, que no deseen ser importantes a costa de la gente y del erario público. Es tiempo que la función pública comience a ver por el futuro de la sociedad buscando y ejecutando acciones reales para el beneficio presente y del mañana, es momento de honrar el espíritu y esencia de ese derecho que todos tenemos de votar y ser votados a través de ejercicios plenamente democráticos encabezados solo por las mejores mujeres y hombres de Durango y de todo el país.

ES cuánto.

Twitter: @ErickSolisT