PODER AL DERECHO… #JusticiaParaLeo
Por: Erick R. Solís Tavizón
Lo que comenzó como un viaje de festejo y de celebración por haber vencido al virus que ha acabado con tantas vidas en el mundo, terminó como una pesadilla no solo para la familia Luna Guerrero, sino para todo un país, que pide a gritos se puedan esclarecer los hechos y que la vida del pequeño Leo, no quede como un caso más de impunidad y de falta de justicia como los que pasan todos los días en México.
El 27 de marzo, el pequeño Leo, acompañado por su familia, acudió al parque de diversiones “Xenses”, ubicado en la rivera Maya, en donde desafortunadamente, al encontrarse nadando con su padre, fue succionado por la corriente, lo que le ocasionó lesiones graves e hizo que lo trasladaran a una clínica particular en donde horas después el pequeño Leo perdió la vida.
La empresa ha reiterado que en más de los 30 años que se ha dedicado a la operación de parques temáticos y con mas de 45 millones de personas que han disfrutado de sus atractivos, “nunca se había suscitado un evento de esta naturaleza”, y ante las tantas reacciones que ha generado la muerte del adolescente en todo el país, la misma empresa atribuyó lo que sucedió a un “error humano”, al omitir la colocación de una tapadera en el atractivo acuático.
Mediante un comunicado, la empresa; “Grupo Xcaret” expuso que el río en donde ocurrieron los hechos, es una atracción de flotación, que tiene una profundidad de 60 centímetros, y, en condiciones habituales no representa ningún riesgo para los visitantes.
Sin embargo, -expusieron- “un error humano ocasionó la falla que condujo a este accidente, tras el cual de inmediato se activaron los protocolos de seguridad y paramédico de planta que acudieron al lugar para aplicar los primeros auxilios y trasladar al menor al hospital”.
Por su parte, el padre del menor, el Doctor Luna Calvo, ha hecho públicas en sus redes sociales y en medios de comunicación nacionales, las irregularidades y la negligencia con la que se actuó al momento del terrible hecho, pues precisó que; a pesar de los intentos del padre para reavivar al adolescente, la ausencia de equipos de reanimación y de servicios del parque fueron escasos, la falta de aviso oportuno al 911 por parte de los empleados del parque que retrasó la llegada y el traslado sin equipo adecuado en la ambulancia a la clínica particular local Amerimed. En donde, hubo resistencia y rechazo por parte del personal de la clínica para trasladar en ambulancia aérea al menor a una clínica u hospital mejor equipada en la Ciudad de México, y además y lo más lamentable, el CONDICIONAMIENTO, por parte de los asesores jurídicos de grupo “Xcaret” de firmar un perdón a favor del parque “Xenses”, sin tener conocimiento, ni entendimiento pleno del contenido del documento, para que la clínica les pudiese entregar el cuerpo del pequeño Leo.
La fiscalía General de Quintana Roo mediante un comunicado, pronunció que la carpeta de investigación aún se encuentra en trámite, por lo que se están realizando todos los actos de investigación pertinentes y conducentes para determinar la probable participación de la o las personas quienes por su comisión y omisión se encuentren relacionadas con el evento delictivo.
No existen palabras que aminoren el sufrimiento, el dolor y la pesadilla por la que está pasando la familia de Leo, ningún padre debemos enfrentar la muerte de su hijo, y de ninguna manera, ningún padre debe ser condicionado a firmar un documento para poder recibir el cuerpo de su hijo, son actos aberrantes que evidencian la falta de sensibilidad humana.
Es por ello, que a través de este importante medio de comunicación, como padre, como abogado y como duranguense, me sumo a las exigencias de justicia que sostiene la familia Luna Guerrero en donde solicitan, se esclarezca el caso que terminó con la vida y con los sueños de este pequeño, en donde se anteponga sobre cualquier cosa el respeto a la Ley y el concepto de justicia.
ES Cuanto.
Twitter: @ErickSolisT