Por: Erick R. Solís Tavizón

“Por la ignorancia nos han dominado más que por la fuerza”

Simón Bolívar

Las coyunturas nos llevan siempre escribir, a los que nos gusta y nos dedicamos a la expresión libre a través de medios impresos y redes sociales, relatos e ideas sobre acontecimientos actuales, y que creemos pueden ser trascendentes, con el fin de que nuestros lectores puedan ser partícipes de la opinión pública y la sociedad en general pueda estar informada y de esa manera estén en posibilidades de conocer el contexto del quehacer político, jurídico y social.

En los últimos meses, nuestro “trending topic” en materia de “letras libres” han sido temas como: las elecciones 2021, coaliciones políticas, Andrés Manuel López Obrador, el contexto social, económico y político que nos ha dejado la pandemia del COVID-19, la vacuna y su metodología para su aplicación, el muy reciente “apagón”, etc. En mi caso, intento exponer temas como: reformas a nuestra Constitución, sus leyes emanadas y todo lo que considero importante con respecto a la aplicación de la Ley, impartición y acceso a la justicia, además de otros que van enfocados a la situación jurídica y política por la que atraviesa nuestro país y nuestro estado.

Estas coyunturas han hecho que nos olvidemos algunos temas que son de suma importancia y de gran relevancia no solo para que la gente este informada, sino para que podamos avanzar como sociedad y que, con la colaboración de los diferentes sectores de la población se pueda generar esa verdadera transformación que no depende de ningún Gobierno ni de ningún color, sino de nosotros mismos. Temas como el derecho y la protección al medio ambiente, las injusticias en nuestro sistema laboral, las violaciones a los Derechos Humanos, la violencia contra la mujer y los menores que no cesa, y por supuesto y en lo que va enfocado el texto de hoy; la educación.

Nuestra Carta Magna en su artículo 3º establece y consagra el derecho a la educación. Este derecho deriva de la lucha constante a partir de que México es independiente; es en el año de 1823 cuando Lucas Alemán presentaba al Congreso su memoria; “sin instrucción no puede haber libertad y la base de la igualdad política y social es la enseñanza elemental”; o bien, diez años después cuando Gómez Farías promulgo varias medidas a la educación, como quitar la educación de manos de la iglesia, dejar la educación en el poder del Estado, instituir la enseñanza libre, entre otras. Pero no fue hasta la promulgación de la Constitución de 1857, que se exponía el artículo 3º estableciendo el derecho a la educación, mismo que sigue vigente hasta nuestros días.

Aunque no solo ha dependido de una persona o de una administración, para lograr el enorme reto de que México cuente con una educación de calidad, han pasado por la Secretaria de Educación Pública, grandes pensadores como: Justo Sierra, José Vasconcelos, Jaime Torres Bodet, Jesús Reyes Heroles, entre otros eruditos que han planeado y diseñado la educación en nuestro país. Ellos como intelectuales tuvieron el enorme desafío de abordar el tema de la educación en México, no solo desde sus escritos, sino también desarrollando un plan de acción y las políticas públicas necesarias para hacer de la educación en México la bandera de desarrollo y de crecimiento.

Al día de hoy, nos enfrentamos a una educación totalmente distinta; a distancia y tecnológica, la pandemia del COVID-19 ha forzado al proyecto educativo a convertirse en su totalidad en un sistema de educación a distancia, amén de la desigualdad de oportunidades tecnológicas y de conectividad de los estudiantes y de la enorme necesidad de generar la capacitación de profesorado para estar a la vanguardia con los sistemas educativos internacionales.

La lucha que comenzó hace casi dos siglos encabezada por Lucas Alemán persiste, se tiene que hacer entonces, un llamado a todos los sectores de la sociedad, para apoyar la docencia desde el gobierno hasta la sociedad civil; que el respeto hacia nuestros maestros sea nuestro primer acercamiento a la escuela, y de igual forma que la primera bandera de cualquier maestro sea el respeto a los alumnos.

ES cuánto.

Twitter: @ErickSolisT