Por: Erick R. Solís Tavizón

“Que todo el que se queje con justicia tenga un tribunal que lo escuche, lo ampare y lo defienda contra lo arbitrario”. José María Morelos y Pavón.

La primera vez que escribí para este espacio, toque un tema el cual considero es de suma importancia para que podamos llevar una vida plena y que el desarrollo social y económico de nuestro estado se convierta en una realidad y no solo un discurso de campaña política; el tema es el Estado de Derecho, el cual, implica que un Gobierno proteja al ciudadano en su vida cotidiana (no solo con leyes escritas), los derechos fundamentales de todos; vida, propiedad y libertad, además, que castigue a todos los que los violen. La justicia, dar cada quien lo suyo, solo es posible, sin caer en el caos de que cada quien la trate de hacer por su propia mano, en un Estado de derecho.

Cuando un Gobierno protege los derechos de unos y permite su violación a otros por su posición social, ideología, raza, grupo político o credo, no hay Estado de derecho. Y cuando el gobierno es el primero en violarlos hay dictadura o despotismo.

Para hablar de un Estado de derecho debe haber una autoridad que castigue a quienes lo violan. Si por incapacidad un Gobierno no restituye los derechos violados, como es el caso de la propiedad o la libertad, no hay Estado de Derecho.

Pero, ¿Por qué iniciar con esto? Porque desde hace tiempo, no solo el foro jurídico, toda la sociedad en general hemos sido insistentes ante la autoridad, para que el Estado de derecho y una correcta administración de justicia, pudiesen generar las condiciones necesarias con el fin que se respeten nuestros derechos tutelados en la Constitución; y es que, ese derecho a la vida, a la libertad, a la seguridad y en este caso a una correcta impartición de justicia por parte de los órganos jurisdiccionales, no fueron respetados,  ya que, desafortunados temas como la corrupción, nepotismo, desvió de recursos, y malos manejos de los mismos fueron los pilares que sostuvieron y mancharon a la administración saliente del Poder Judicial del Estado. Por tal motivo, la Barra Mexicana Colegio de Abogados de Durango puso el ejemplo, y presentó en su momento ante la Fiscalía Especializada en delitos y combate a la corrupción del Estado una denuncia en contra del extitular Esteban Calderón Rosas, por tales motivos.

Después de haber integrado la carpeta de investigación, se encontraron los elementos suficientes para que la denuncia prosperara. Sin embargo, el fuero que en su momento protegía al entonces titular del poder judicial frenó el caso. Como alternativa para continuar el proceso de la denuncia, la Fiscalía Anticorrupción, optó por solicitar un Juicio de Procedencia ante el Congreso del Estado. Meses después la FECCED de la mano del foro jurídico acudieron al Congreso del Estado para hacer la solicitud formal del Juicio de Procedencia, en el que se anexó la carpeta de investigación, en donde se demostraron los elementos suficientes para que ellos pudieran demostrar la responsabilidad por la que se le denunciaba, y así pudiera ser retirado el fuero para poder llevar ante el juez la causa y se pudiese judicializar.

Después de meses de gestión, de manifestación, acuerdos, pero sobre todo de lucha y unidad, el foro jurídico que encabeza el Lic. Gustavo Gamero Luna cumplió la misión, la cual, no solo fue la de derrocar a un funcionario corrupto del Poder Judicial, el foro jurídico cumple con la misión de que el Estado de Derecho sea la base toral del sistema judicial en Durango.

Al día de hoy, se vislumbran nuevos tiempos en el Poder Judicial del Estado, pues la unidad y el generar acuerdos, entre la nueva titularidad y los organismos de juristas, pueden ser claves y la base para que todos podamos tener acceso a la administración y procuración de justicia que merecemos.

ES Cuanto.

Twitter: @ErickSolisT