Precauciones
Por: Emmanuel Salazar
La Secretaría del Bienestar lleva a cabo el proceso para pagar a los adultos mayores, en condiciones que francamente ponen en riesgo a los beneficiarios, sobre todo en el marco de la emergencia sanitaria generada por el coronavirus COVID-19.
La entrega directa del apoyo económico, tradicionalmente, llega a concentrar en las comunidades a decenas de beneficiarios, de tal manera que, en algunos puntos, incluso se pueden llegar a contabilizar un centenar de personas de la tercera edad en un solo lugar.
Apenas este jueves en el municipio de Canatlán, ocurrió una situación que propicio la suspensión de la entrega de los apoyos, pues trascendió que una empleada de Telecomm, la empresa paraestatal que lleva a cabo dichos pagos, estaba enferma y presuntamente presentaba síntomas de al menos una gripa.
A dicha empleada se le obligo acudir a la sucursal para abrir las puertas y recibir los recursos que se entregarían en los poblados de Flores Magín y Venustiano Carranza, lo cual implicaba reunir a unos 180 ancianos en total, sin embargo, ante la alerta que surgió desde la propia afectada, finalmente se decidió cancelar la entrega.
José Díaz, responsable del programa de la Secretaría de Bienestar, en Canatlán, aseguró que la empleada con gripa, a la que se le ordenó en el ISSSTE mantenerse aislada, pero que sus jefes le ordenaron acudir al trabajo para hacer la recepción de recursos; nunca estuvo en el operativo de entrega.
En ese sentido, Díaz aseguró que nunca estuvieron en riesgo los ancianos que habrían de recibir su pago, pues en ningún momento la mujer enferma subió a la patrulla en la que se hizo el traslado de los valores a la población, en donde finalmente se canceló el evento.
Esa circunstancia es la que puede llegar a poner en riesgo a otros adultos mayores en el proceso de pago del beneficio, el cual ciertamente es positivo para ellos, pero que en todo caso se debe de realizar tomando medidas preventivas que eviten un eventual contagio.
Indudablemente se tiene un reto para los responsables del programa para lograr concretar la entrega y asegurar al mismo tiempo evitar un contagio, sobre todo en este sector de la población que ha resultado como el objetivo principal del COVID-19 y que ha provocado gran cantidad de decesos en los países occidentales en donde se ha vivido crisis por la presencia de la enfermedad.
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