Por: Gilberto Jiménez Carrillo

El filósofo de la reforma liberal, Melchor Ocampo, dijo que ser liberal en todo cuesta trabajo, porque se requiere el ánimo de ser hombre en todo. René Bejarano Martínez, el personaje que apareció en unos escandalosos videos en marzo del 2004, encabeza desde hace poco más de 15 años, el Movimiento Nacional por la Esperanza. Entre otros objetivos, sus propuestas son convocar a un Congreso Constituyente para aprobar una nueva Constitución en México, con el propósito de que la Cuarta Transformación (4T) se vuelva irreversible. Quien fuera secretario particular de Andrés Manuel López Obrador cuando el tabasqueño era jefe de Gobierno del Distrito Federal, pasó siete meses en el Reclusorio Sur, entre noviembre de 2004 y julio de 2005. Por ese bache en el camino del Licenciado Bejarano, sus enemigos políticos de adentro y de afuera lo quisieron hacer pedazos, pero no pudieron con él, pues con entereza, aplomo y carácter, superó el estigma que intentaron colgarle y en la actualidad sigue luchando por sus creencias e ideales.

Con el trabajo y esfuerzo de ciudadanos que buscan un nuevo México, el Movimiento Nacional por la Esperanza cuenta ya con una membresía cercana al millón y medio de personas, tanto en el país como en el extranjero. Esta asociación civil, entre otras cosas, promueve proyectos productivos y obras de carácter social para que los mexicanos que así lo requieren mejoren su nivel de vida. En la actualidad, líderes regionales de los cuatro puntos cardinales del país, simpatizan y trabajan dentro de las filas de MNE, representando auténticos intereses de la sociedad. Esta organización muestra un nuevo rostro de la participación social en las decisiones públicas, y marca una pauta con nuevas formas de gestionar la solución de problemas colectivos bajo principios de ética, compromiso y responsabilidad. Sin aspavientos ni sobresaltos, Bejarano Martínez, ícono de la izquierda en la capital de la nación, construye una estructura político-electoral en todo el país. Con la confianza de una persona que sabe lo que hace y que aparentemente no le importan, en lo más mínimo, las reacciones que pueda generar, a través del Movimiento Nacional por la Esperanza, la carrera política de Rene Bejarano tiene presente y futuro.

Cuando se tienen firmes las convicciones se puede resistir y se puede trabajar con tenacidad para lograr los objetivos, así lo hizo durante gran parte de su vida Melchor Ocampo y cuando los ataques de sus enemigos de adentro y de afuera arreciaban, pronunció la célebre frase: “Me doblo, pero no me quiebro”. Lo mismo ocurrió con René Bejarano Martínez, que el 6 de julio del 2005, fue absuelto de las acusaciones. Esto obligó a la PGR a dar una disculpa pública por los daños morales causados a su persona y a su familia, que hasta la fecha no se ha dado, la cual no necesita, porque podrán seguir señalándolo y exhibiéndolo por un error que como ser humano cometió, quizá se doble una o dos veces, pero jamás lo van a quebrar, el maestro Bejarano no es de esos, ya que como mencionó Melchor Ocampo, para ser liberal en todo cuesta trabajo, porque se requiere el ánimo de ser hombre en todo. Alguien anda muy activo y no es solamente el presidente Andrés Manuel López Obrador. ¿Se acuerdan de René Bejarano? Sí, aquel señor al que vimos en un video escándalo en el programa del payaso de Brozo. ¡Pues está de vuelta!            

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