Renuncia
Por: Emmanuel Salazar
Sin duda alguna, hasta ahora es el PRI el partido político que mayor desgaste vive tras los acomodos que trae consigo las candidaturas a diputados locales y federales, pues en el ínter ha ocurrido la renuncia de un expresidente estatal y de un presidente municipal.
Si bien para muchos el perfil de Gustavo Lugo, expresidente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en el sexenio del extinto Ángel Sergio Guerrero Mier, resulta una renuncia que hace tiempo estaba decantada no deja de ser significativo el suceso, más cuando dicho partido político debería de guardar las formas y mantener la imagen de unidad. La renuncia de Lugo podría concluir con su suma al partido Movimiento Ciudadano que encabeza formalmente el exdiputado federal y también expriista Oscar García Barrón, según los comentarios realizados por el propio político que ofreció una conferencia de prensa en donde detalló que tenía más de 30 años en el PRI.
Días antes, ocurrió otra renuncia al PRI que implica de alguna manera un rompimiento mayor al interior de dicho partido político, pues en ese caso fue el presidente municipal del Mezquital, José Osbaldo Santillán Gómez, quien intentó convertirse en candidato a diputado por el Distrito XV sin lograr su cometido. Santillán Gómez como autoridad del Mezquital, el municipio en donde se concentra la población indígena del estado habrá de dificultar la operación de los cuadros priistas para votar a favor de dicho partido político y por ende no será remoto que finalmente partidos diferentes al PRI puedan ganar la votación en el área.
En tiempos de Guerrero Mier, Mezquital era la gran reserva de votos del PRI, pues en aquellos días se lograba que prácticamente todos los indígenas votarán a favor de aspirantes priistas y era común encontrar casillas electorales que se les denomino zapato porque contaban solo con sufragios a favor de los candidatos priistas.
Seguramente en la elección que se vivirá en junio esa tradición cambiará y habrá una fragmentación mayor de los sufragios aún y cuando el PRI hábilmente ha respondido con una candidata indígena que buscará anclar el voto a su favor y evitar que la población finalmente vote mayoritariamente por alguna otra opción política.
En el mismo PRI todo avanza para que Enrique Benítez Ojeda vuelva al Congreso del Estado por la vía de la representación proporcional y protagonice desde esa posición en el proceso electoral del próximo año cuando se renueve el ejecutivo estatal.
Twitter: @jemmanuelsr