POR: DIONEL SENA

Cuando parecía que no volveríamos a ver en eventos multitudinarios las famosas consultas a mano alzada que ha implementado desde que arrancó este sexenio el Presidente Andrés Manuel López Obrador, bueno pues esta forma de hacer política y definir los proyectos estratégicos para cada una de las regiones del país se mantendrán en lo que resta de su administración, lo cual lo confirmó él mismo tras supervisar obras de construcción en caminos del estado de Oaxaca, pues asegura que esa dinámica él la viene implementando desde hace ya 30 años y no tendría por que cambiarla ahora, lo que seguramente puso a temblar a los 39 gobernadores, mismos que corren el riesgo de que el día que el Ejecutivo realice alguna gira de trabajo por sus estados, algunas obras pasen a mejor vida y ejemplos ya hay muchos.

En medio de la sierra oaxaqueña, el tabasqueño recordó que una de sus consultas “gansito” más laureadas por los mexicanos y que realmente reflejan el sentir de quienes viven en esta nación, fue cuando les consultó su opinión para saber si se enfrentaba al presidente Donald Trump, a lo que la gran mayoría de los presentes respondieron que no, lo que fue una buena decisión, sin embargo ha habido otros casos como la cancelación del metrobús en la Laguna de Durango que en definitiva, despertó muchos comentarios negativos hacia esta administración federal por todo el país, al grado de que el proyecto se está valorando una vez más y no sería extraño que lo apruebe en el corto plazo.

Vía consultas a mano alzada, el propio López Obrador adelantó que construiría cinco mil 500 kilómetros en caminos rurales durante su sexenio y que, atrás quedaron aquellas obras que se hacían solo con una capa de asfalto y que una vez que llegaban las lluvias, las rúas se volvían a deteriorar, lo cual permitió la “Mafia del Poder” durante décadas y que le aportaron mucho a la corrupción, es por ello que las consultas a las cuales hace referencia, no le quitan legitimidad a los proyectos y las obras, por lo que las ya aprobadas serán autorizadas por esta vía y las que aún están en proyecto también, lo que en definitiva arrojará la cancelación de muchas obras estratégicas, lo que le quita el sueño seguramente a mandatarios y presidentes municipales, pues mucho hacen para bajar los recursos que se necesitan para que en un minuto se los echen abajo.

Tanto José Aispuro Torres como Miguel Ángel Riquelme, gobernadores de Durango y Coahuila de manera respectiva, se comprometieron a abordar al Presidente para replantearle el proyecto del metrobús, el mismo que el tabasqueño bajó después de una consulta a mano alzada y en un ambiente de notoria desaprobación a dicha obra, por lo que se espera reflexione sobre la decisión que tomó y le puedan dar para adelante a ese medio de transporte que será en beneficio de 1.2 millones de personas que lo utilizarían en Matamoros, Torreón, Gómez Palacio y Lerdo, el que obviamente representa un serio riesgo para el gran “negocio” que tienen los concesionarios en la Laguna, mismos que además del mal servicio que prestan a sus usuarios, han sido incapaces de modernizar sus unidades, de ahí la cerrazón a la cual hacemos referencia, no por nada aún no permiten la entrada de Uber, el cual por ejemplo, sí opera del lado de Coahuila.

Twitter: @dionelsena