Por: Dionel Sena

En los últimos días, ha estado en la conversación la diputada local Sandra Amaya, misma que entre otras cosas, fue aprobada por su partido Morena para ir en la primera posición de la lista de plurinominales, una posición justa para la representación que ha tenido de ese partido en Durango; sin embargo, fue el consejo general del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) que consideró que no cumplió con cierta documentación, lo que provocó que dicho órgano decidiera no aprobar su aspiración, por lo que es un hecho que el caso va a terminar en el Tribunal Estatal Electoral vía impugnación a lo que la afectada tiene derecho, por lo que no se descarta que los magistrados terminen corrigiéndole la plana al IEPC, lo cual no sería nuevo.

Hasta donde ha trascendido, los consejeros electorales consideraron que no se cumplieron algunos requisitos que se solicitaron y otros que se presentaron fuera de tiempo, motivo por el cual se le negó el registro, por lo que Sandra Amaya tendrá cuatro días a partir de que se dio esa resolución para impugnarla, lo que es un hecho que hará, pues tiene derechos electorales que buscará se respeten, además de que en una total coherencia política ha decidido renunciar a la presidencia de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado para que ello no interfiera con su lucha por la restitución de la candidatura a la que asegura tiene pleno derecho, lo que habla de una madurez política que pocas veces se ha visto en un caso así, pues cualquier otro se hubiera mantenido al frente del poder legislativo y en definitiva no es su caso.

Se debe precisar que, si bien no fue el único registro que el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana negó a candidatos tanto de mayoría relativa como de representación proporcional, es innegable que por la investidura de Sandra Amaya, su caso es el que más acaparó la atención de la opinión pública, pues se sabe que el proceso interno de Morena no fue sencillo en la designación de sus candidatos y de ahí el que se haya especulado que la grilla vino de adentro, aunque fue el propio consejero presidente Roberto Herrera quien este martes confirmó ante medios de comunicación que efectivamente, dicho registro había sido cancelado por falta de documentación, aunque nunca se precisó que documentos fueron los que no se presentaron en tiempo y en forma.

A partir de la decisión de Sandra Amaya de renunciar, habrá que ver cómo queda configurada la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado (Jucopo) que si bien no ha interrumpido sus funciones en esta etapa del proceso electoral, es innegable que deberá haber alguien que la supla por los días que estará ausente, por lo que seguramente será alguien de ese mismo grupo parlamentario quien lo haga; habrá que ver como se ponen de acuerdo cada uno de los legisladores para determinar quién conducirá esos trabajos legislativos el tiempo que dure el proceso de impugnación ya referido, el cual se llevará hasta las últimas consecuencias.

Al tiempo…

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