Por: Dionel Sena

Algo que dejó al descubierto la jornada electoral del pasado domingo en Durango, es el verdadero capital político de los partidos en el estado, mismos que ya no pudieron maquillar, lo que durante mucho tiempo maquillaron, presumiendo votos que nunca tuvieron y ahora que les tocó quedar exhibidos, no les quedó otra más que reconocer el mensaje de los duranguenses en las urnas, sin embargo, hubo fuerzas electorales que dejaron constancia de lo que pudieran ofrecer para las elecciones venideras, uno de ellos, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), el cual logró sacar prácticamente la misma votación que en el 2019, aún y a pesar de que fue solo y tuvo que lidiar con el voto útil provocado por las dos grandes coaliciones, de ahí el que valga la pena el papel que jugará Gerardo Villarreal y compañía en el 2022.

Por principio de cuentas se debe establecer que esta es la segunda ocasión que ese instituto político decide ir con candidatos propios en cada uno de los 15 distritos electorales locales, el resultado, 29 mil 906 sufragios, es decir, prácticamente la misma votación del 2019, con la coincidencia de que en aquel año, de igual manera el voto se polarizó, por lo que queda claro que el capital político del cual se puede partir en el Partido Verde son 30 mil sufragios, mismos que para nada son despreciables y que por ejemplo, si Morena hubiera incluido al Verde en lugar de al PT en esa coalición, hubieran ganado al menos otras dos o tres diputaciones locales más de mayoría y una “pluri” más, lo que les hubiera convertido en el grupo o coalición parlamentaria más numerosa a partir de septiembre de este año, pero el hubiera no existe.

Indudablemente que hubo candidaturas por demás interesantes, tal es el caso de Osbaldo Santillán en el Distrito 15, que hizo un papel por demás digno, también Gerardo Villarreal dio la pelea en el 14 hasta el final, al igual que varios cuadros en la Comarca Lagunera y en esta capital que dejaron un muy buen sabor de boca y que indudablemente ya se ganaron un lugar en ese instituto político en los años venideros, pues mostraron – entre otras cosas – identidad con la marca, lealtad, competitividad y una gran aceptación entre el electorado, más allá de que tuvieron que lidiar con el fenómeno del voto útil que al final, no les permitió hacer un mejor papel en las urnas, aunque ello no quiere decir que les haya ido mal.

Como marca, el Partido Verde Ecologista de México es mucho más rentable que el Partido del Trabajo, Movimiento Ciudadano y hasta el PRD, lo anterior vale la pena tomarlo en cuenta, pues a pesar de que mantiene una alianza nacional con Morena, es innegable que Gerardo Villarreal siempre ha tenido la libertad del comité ejecutivo nacional de tomar las mejores decisiones para ese instituto político, las cuales pueden ser desde ir solos o hasta explorar alianzas con otras fuerzas electorales, pues lo que se viene en el 2022, es la «Madre de Todas Las Batallas» y ahí se va a necesitar de la ayuda de todos, incluso hasta de los más impensables, por lo que ese escenario no se puede descartar, máxime cuando puede presentar un capital político que es totalmente medible y que ha sido consistente en al menos las tres últimas elecciones.

Twitter: @dionelsena