Por: Dionel Sena

Finalmente se confirmó lo que en este mismo espacio editorial habíamos adelantado días atrás, sobre la alta posibilidad que Roberto Herrera Hernández se convirtiera en el nuevo consejero presidente del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), mismo que no es ningún secreto, de un tiempo a la fecha, ha estado en el ojo del huracán, ya sea por los salarios y prestaciones de sus consejeros, los extraños manejos presupuestales que le costaron el trabajo al anterior presidente y la cantidad de corregidas de plana que le ha hecho el Tribunal Estatal Electoral, de lo cual ya los duranguenses están acostumbrados, por lo que la llegada de alguien con la experiencia y el bagaje del nuevo integrante, indudablemente que deberá ayudar a evitar este tipo de temas que en nada le abonan al funcionamiento de un órgano electoral que fue creado con fines absolutamente opuestos.

Será este día cuando seguramente el resto de los seis consejeros, los directores y los titulares de cada una de las áreas, le presenten sus cartas credenciales a Herrera Hernández, mismo que hasta donde se sabe, conoce muy bien las entrañas de un instituto como ese, por lo que no extrañaría que quienes no justifiquen su presencia en ese órgano, tengan los días contados, pues solo así se podrá afrontar un proceso electoral local que inicia el 1 de noviembre, es decir, sólo con los mejores hombres y mujeres, pues no son tiempos fáciles para organizarlo todo y lo menos que se necesitan son recomendados o quienes en definitiva no tienen el perfil para entregar buenos resultados, no cabe duda que habrá más de uno que deberá estar muy preocupado, pues el recién llegado tratará de imprimirle su sello a su gestión y ello conllevará el tomar algunas decisiones difíciles.

En la primera entrevista que concedió Roberto Herrera para algún medio de comunicación en Durango, después claro de su ratificación por parte del consejo general del INE, el nuevo consejero presidente fue claro al asegurar que no tenía filias políticas ni partidistas, y que su trayectoria la había labrado en base al esfuerzo, la dedicación al estudio, por aquello de aquel controversial fallo que emitió en el 2010, cuando se libró aquí la elección a gobernador más competida de la historia de esta entidad y que como presidente del Tribunal Estatal Electoral, lo estigmatizó durante varios años en ciertos grupos políticos, sin embargo, el que el Instituto Nacional Electoral (INE) que a través de la Comisión de Postulación lo presentara como su única propuesta para el cargo, deja en claro que su trayectoria y conocimientos son elementos suficientes para llevar a buen puerto ese OPLE.

Claro que en su gestión deberá buscar la unidad al interior, la autonomía, independencia, imparcialidad en su actuar, rendición de cuentas y transparencia en el manejo de recursos, generar confianza en ciudadanía, procurar la paridad de género y combatir la violencia política de género, por mencionar algunos de los temas en los que seguramente Roberto Herrera Hernández hará especial hincapié, valorando la idea de que se ha generado una gran expectativa por su llegada, pues ni duda cabe que tiene amplios conocimientos en el tema electoral y además, sabe cómo comunicar ante los medios, por lo que lo más seguro es que deje atrás los antecedentes de ocultarse de la prensa como lo hicieron sus dos antecesores, uno de ellos como titular y el otro en carácter de interino, lo que no dejan de ser un escenario promisorio, pues cualquier tema por complejo que sea, se podrá aclarar ante la opinión pública con la prontitud debida.

Twitter: @dionelsena