Por: Dionel Sena

Este jueves trascendió el contenido de una carta que la regidora con licencia Paulina Monreal compartió en redes sociales y que en una primera instancia, iba dedicada a los liderazgos, simpatizantes y militancia del partido Movimiento Ciudadano, sin embargo, no hay que ser un genio para saber que dicha carta tenía como destinatario a Oscar García Barrón, mismo que al parecer, no le cumplirá el pacto que hizo con ella de registrarla en la primera posición de la lista de plurinominales para las diputaciones locales, el motivo, que intereses externos a Durango de ese instituto político quieren que vaya alguien más, es decir, que le quieren imponer -una vez más- candidatos al «profe» que no sería precisamente el mejor augurio y en la antesala de su primera elección al frente de MC.

Ni duda cabe que por conocimiento, preparación, lealtad, institucionalidad y liderazgo, nadie mejor que Paulina Monreal para enarbolar la causa emecista en la próxima Legislatura federal, de ahí el que se viniera proyectando su nombre con mucho tiempo de antelación, sin embargo, parece que otros recién llegados militantes de ese partido y que viven en la Ciudad de México, están tratando de tomar control de Movimiento Ciudadano en Durango «sugiriendo» candidatos y asegurando que es la voluntad de Dante Delgado y de Clemente Castañeda, lo que el dos veces presidente municipal de San Bernardo y Ocampo debería cotejar antes de tomar una decisión de la que el día de mañana se pueda arrepentir, pues si acepta «recomendaciones» esas personas no se la van a deber y eso en política es un adagio que siempre se cumple.

Ya existe el antecedente de la manera en que se «brincaron» al hoy dirigente estatal de MC imponiéndole en este mismo proceso al abanderado para la diputación federal 04 que al mismo tiempo, va muy bien acomodado en la lista de plurinominales de la primera circunscripción federal, no vaya a ser que a la vuelta de este proceso electoral y después de que el trabajo se haya hecho, también lo quieran poner al frente del partido en Durango, lo que no suena descabellado tomando en cuenta el poder de influencia que ha demostrado tener en el seno emecista nacional, algo que el hoy dirigente estatal no debería pasar por alto y respaldar a quienes se la han jugado con él desde que llegó a ese partido, entre ellos, la propia Paulina Monreal que se convirtió en su brazo derecho y que esa cercanía parece que la hace sacrificable, acto político que en estos tiempos puede generar altos costos.
Por lo anterior reviste especial interés el contenido de la carta de la regidora, la que deja en claro que no la van a conformar con una candidatura para una diputación local, pues en todo caso, le convendría más regresarse a su regiduría y ver los toros desde la barrera, pues pasando este proceso electoral, serán otras las condiciones y las capacidades de negociación que se vendrán para el 2022, que por cómo se ven las cosas, quizá vaya a ser con otros personajes con lo que se tenga que negociar, pues una cosa está clara, Paulina Monreal no tiene el menor interés de dejar las filas del partido naranja, del cual durante un buen tiempo, se convirtió en su principal referente, pero de que le abre un boquete a Movimiento Ciudadano para lo que se viene, eso es innegable.

Al tiempo…