Por: Dionel Sena

Este lunes, trascendió una de las propuestas más ambiciosas que está impulsando ni más ni menos que el Partido Revolucionario Institucional (PRI), la denominada Ley Quemón, que no es otra que hacer un registro público nacional de agresores sexuales y otro registro igual pero de deudores alimenticios, lo que por donde se le vea, está lleno de morbo y de opiniones encontradas, pues para muchos el Instituto político que menos cara tiene para presentar este tipo de iniciativas, es justamente el tricolor, el cual tiene a varios personajes del pasado inmersos en ese tipo de acusaciones, aunque por otro lado, es un juego político que les puede dar bastante si se vende de manera adecuada y sus aliados en la cámara baja permiten que transite, caso contrario corre el riesgo de perderse en el limbo legislativo, como ya ha ocurrido con otras iniciativas anteriores.

El tema es delicado por donde se le quiera ver, pues así como seguramente estarán incluidos en la lista aquellos que hayan cometido violencia sexual contra mujeres, niñas y niños, serán automáticamente incluidos en ese registro nacional, de la misma manera, hay otros que son inocentes, por lo que además de purgar la pena que les dicten por haber cometido tal falta, también tendrán que lidiar con este «quemón», en mayor medida sus familias que ellos mismos, pues dentro de cualquier penal la información de este tipo no fluye con la misma rapidez que afuera, es ahí justamente donde radica la delicada del tratamiento a un tema semejante.

Hay quienes ven poco coherente que sea justamente el Partido Revolucionario Institucional el que esté impulsando semejante iniciativa, pues son varios de sus activos los que han estado inmersos en temas de corrupción, caso concreto el de algunos gobernadores, acusados de enriquecimiento ilícito o asociación delictuosa por mencionar a algunos, por lo que es casi seguro que no faltará el que trate de restarles mérito, de ahí la importancia de que sea el mismísimo Alejandro Moreno Cárdenas al que le tocara defender a capa y espada dicha propuesta, la cual no es mala y que sería de gran utilidad, en especial la del registro nacional de deudores, que permitiría identificar a aquellos padres irresponsables que dejaron a sus hijos a su suerte, la que se espera pueda transitar independientemente de quien la proponga.

Desde luego que la iniciativa como tal primero deberá pasar varios filtros, pues la Ley Quemón como se propone, sería violatoria de la Constitución, pues la Carta Magna prohíbe las penas infamantes y transgrede los derechos humanos de quienes al haber incurrido en un delito semejante y purgado la pena correspondiente por ello, tratarán de buscar la reinserción social, sin embargo, ya estarán marcados de por vida, pues al existir una Ley semejante, dichos antecedentes los perseguirá por años y al no poder regresar a la vida común, quizá con el tiempo no les quede de otra que delinquir de alguna manera, lo que a la postre se convertirá en un problema aún mayor, pues hasta el momento dicha iniciativa no ofrece soluciones de fondo a quienes busquen reformarse, por ahora todo indica que lo más importante es dar a conocer quien está impulsando dicha Ley, lo que no puede ser una coincidencia.

Twitter: @dionelsena