Por: Dionel Sena

Lo ocurrido este miércoles en un centro de desarrollo en la colonia Joyas del Valle de la ciudad de Durango, es la prueba fehaciente de que la psicosis de las brigadas antidespensas que ha desplegado el Partido del Trabajo (PT) ya tocó fondo, pues sin decir agua va, agredieron físicamente a un promotor alimentario que labora en el DIF estatal que entregaba apoyos a sectores vulnerables de esa zona y donde según algunos testimonios, eso lo hace de manera regular sin importar si hay campañas electorales o no, por lo que no sólo interrumpieron la entrega de esas ayudas alimentarias, sino que también de manera cobarde, le propinaron una severa golpiza fracturandole la nariz y con golpes en prácticamente todo el cuerpo, lo que ya resulta inadmisible, pues hay instancias como para haber presentado una denuncia, si es que consideraban que algo irregular estaba ocurriendo, sin embargo, el haber actuado de la forma en que lo hicieron, es absolutamente reprobable y difícilmente encontrarán el apoyo social a ese tipo de actos.

Como responsables del hecho aparecen – para no variar – personajes como Primitivo Ríos, Manuel Ríos y María Páez Güereca, por lo que ahora pudieran tener que responder ante el agente del Ministerio Público del delito de lesiones; además de que en ningún momento pudieron comprobar que en dicha entrega se estuvieran haciendo uso de recursos públicos, bienes o fondos y servicios con fines partidistas, pues hasta donde se ha explicado, se trata de un programa público ajeno a cualquier partido político, por lo que su uso está prohibido para fines distintos para el que fue creado, es decir, ayudar a la personas con carencia alimentaria y es lo que estaba haciendo el hombre lesionado, cuando fue violentado de la manera en que ya se expuso, lo que tiene a los tres personajes antes citados en un menudo problema del que tratarán de salir justificando una acción política electoral, aunque al haber lesiones de por medio, el delito cambia de matiz y sus consecuencias también.

Trascendió que las despensas por las que el Partido del Trabajo hizo tanto escándalo, forman parte del Fondo de Aportación Múltiple, el cual siempre ha tenido un mecanismo de corresponsabilidad y que es parte del Programa de Estrategia Integral de Asistencia Social Alimentaria y Desarrollo Comunitario para las Entidades Federativas, de ahí el que se entienda que más allá de que haya un proceso electoral en curso, son programas y apoyos que no pueden o no deberían ser interrumpidos, lo que claro está en este caso ocurrió y de una forma que seguramente les implicará posibles sanciones legales a los involucrados, mismos que parecen estar más desesperados por cazar brigadas anti despensas que por presentar propuestas reales a la ciudadanía para tratar de ocupar una curul en la próxima legislatura local, lo que aún está por verse.

Ya la semana anterior la propia regidora Daniela Soto denunció esta psicosis creada por las brigadas anti despensas del Partido del Trabajo, las cuales impedían entregar cualquier tipo de apoyo, pues para ellos, todo es por la coacción del voto, por lo que muchos han optado por esperar a que pasen las campañas electorales para volver a repartir apoyos alimentarios, en donde los únicos afectados son justamente las familias que se veían beneficiadas con estas entregas, mismas que deberán esperar unas semanas más para ver regularizado su calendario de apoyos, el cual en este momento no se han podido entregar a causa de esa absurda estrategia del PT que con el caso ya documentado, indudablemente que tocó fondo y de cuyas consecuencias aún no hemos visto todo.

Al tiempo…

Twitter: @dionelsena