Por: Dionel Sena

Dicen que en política hay que estar atentos a las señales, para saber qué es lo que nos puede deparar el futuro a partir de las decisiones que se tomen en los distintos órdenes de Gobierno o bien en alguno de los tres poderes, justo ese pudiera ser el caso de los mensajes que mandaron este lunes tanto el gobernador José Aispuro Torres como el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, Iván Gurrola, pues además de informar ante los medios de comunicación que ya se habían reunido y que habían acordado transitar por el bien de Durango, el tema de cuánto será el periodo que habla de cumplir el próximo titular del ejecutivo fue abordado por ambos personajes, lo que sugiere que la próxima gubernatura no será de seis años como se viene realizando hasta ahora.

Se debe recordar que fue el propio Iván Gurrola, quien en el amanecer de esta Legislatura local propuso modificar el período de Gobierno del próximo Mandatario estatal, argumentando que ello significaría ahorros importantes para el erario, pues la entidad tiene elecciones prácticamente cada año y además, con baja participación ciudadana en relación a otras entidades federativas, por lo que no es descabellado pensar que ahora que está al frente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) pudiera retomar esa iniciativa, la cual por cierto está robustecida por el Tribunal Estatal Electoral que ya presentó de igual manera una propuesta semejante que hasta donde ha trascendido, no ha sido aún tratada en comisiones por los diputados locales.

Aunado a lo anterior, este lunes el gobernador José Aispuro Torres abordado por los medios de comunicación, reconoció que para él la próxima gubernatura debería ser de dos o cinco años, en la misma idea de empatarla con la federal y así evitar que se gasten tantos recursos económicos, aunque dejó en claro que esa sería una responsabilidad del Poder Legislativo y de nadie más, de ahí el que no se necesite ser un genio en la materia para saber que esa posibilidad pudiera transitar incluso antes del mes de agosto, por lo que incluso poco después de las elecciones pudieran ponerse de acuerdo los distintos grupos parlamentarios y analizar esa posibilidad, la cual sobra decir, cambiaría por completo el calendario electoral en Durango y los planes de muchos que están más que apuntados para el 2022.

La propuesta no es descabellada y en términos reales, ya son varias las intenciones que se han tenido de modificar los años electorales para gobernador, ya se verá si el tema transita o se queda solo en buenas intenciones, valorando que en este momento en el Congreso del Estado hay algunos diputados y diputadas que están en carácter de suplentes y es probable que, cuando la propuesta se presente, no tengan la menor idea de lo que tendrán ante sí, ni más ni menos que el futuro político de muchos que están esperanzados desde hace tiempo en ocupar la máxima magistratura de esta entidad, mismo que si se va a dos años, se empataría con los comicios del 2024, año en el que se renovará -entre otras cosas- la Presidencia de la República y en donde sobra decir que todo puede pasar, valorando la forma de votar del electorado duranguense.

Twitter: @dionelsena