Por: Dionel Sena

La labor de un brigadista de Conafor sin duda que no debe ser nada sencilla, pues son los encargados de acudir a los sitios más recónditos del estado a tratar de controlar, combatir y sofocar un incendio forestal antes que el mismo haga estragos irreversibles para nuestro ecosistema, sin embargo, éstas son labores que regularmente sobrepasan sus horarios de trabajo, pues sería complicado que sólo durante ocho horas realicen estas labores y después se vayan a su casa, pues en los hechos deben abandonar su lugar de residencia durante días y a veces semanas, trabajar día y noche hasta conseguir el objetivo, por lo que lo menos que esperan es que la delegación les haga válidas las horas extra, lo que en definitiva en Durango no está ocurriendo.

Este viernes, brigadistas de la Comisión Nacional Forestal decidieron bloquear el acceso a dichas oficinas hasta que la delegación les pague lo correspondiente a las horas extras prestadas en esta temporada de incendios forestales, mismos que dicho sea de paso, no han sido pocos, al grado que por este concepto, el adeudo podría estar por encima del millón de pesos. El problema es que hasta el propio Daniel Trujano Tomé ha reconocido que la solución no pasa por sus manos, sino más bien de parte de la Federación que realizó distintos recortes a varios programas que maneja la dependencia, entre ellos justamente el que se está demandando.

Con lo anterior, más que darle tranquilidad o certidumbre a los brigadistas, ocurrió todo lo contrario, pues todo indica que están determinados a no quitar el dedo del renglón hasta que su pliego petitorio sea atendido o al menos obtener una respuesta que les haga pensar que su demanda será solucionada, mientras esto ocurre, hay que rogarle a la madre naturaleza que ya no haya más incendios en Durango, lo cual es factible debido a que ya empezó a llover en varios municipios serranos del estado, sin embargo, eso no es una garantía de que los siniestros se van a seguir presentando mientras las precipitaciones pluviales no sean generalizadas, la pregunta es, ¿quién los va a combatir mientras este problema persiste?, y lo cual nos afecta a todos, no solamente a los apagafuegos y a la propia Conafor.

El tema es tan delicado en cuanto a los recortes presupuestales se refiere, que lo más seguro es que cuando venga el presidente Andrés Manuel López Obrador -este mes-,  la situación de los brigadistas seguirá siendo la misma, es decir, mantendrán aún su demanda, la cual difícilmente será solucionada, pues no hay dinero con el cual pagarles, por lo que será  interesante saber cómo van a manejar esta situación los demandantes mientras esto no ocurra, pues el riesgo de que no acudan más a combatir los incendios forestales a las zonas serranas de Durango no deja de ser un tema que debería preocuparnos a todos, sólo hay que recordar lo debastador que fue el incendio registrado en días pasados en Bayacora, mismo que consumió miles de hectáreas de bosque.

Twitter: @dionelsena