Por: Dionel Sena

Luego del ultimátum que Donald Trump le dio a México para que se pusiera las pilas y combatir de una vez por todas la migración que pasa por nuestro país, con destino a los Estados Unidos, el Gobierno de la «4T» lo ha tomado muy en serio y ya dispuso de 26 mil elementos, tanto de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) como de la Guardia Nacional, para entregar los resultados que tanto se esperan de esta estrategia, de los cuales, 15 mil ya fueron enviados a la frontera norte y el resto a la franja entre Guatemala y Belice, mismos que en definitiva, representan un serio obstáculo para quienes alguna vez tuvieron el «sueño americano» y de igual manera, quienes vieron el trasiego de migrantes como una mina de oro a la que en definitiva no les están sacando los mismos dividendos que en antaño, debido a que las medidas de seguridad y de vigilancia se han incrementado de forma exponencial.

Fue el propio general Luis Crescencio Sandoval, titular de la Sedena, quien brindó un informe detallado acerca de lo que se estaba haciendo con todo este tema que no cabe la menor duda, se ha convertido en una prioridad en estos momentos para la gestión de Andrés Manuel López Obrador, por lo que al menos, por un tiempo, los migrantes ya no sólo deberán preocuparse por el crimen organizado a su paso por nuestro país, sino que ahora también lo tendrán que hacer de la Guardia Nacional, del ejército y la Marina, aunque ninguna de esas tres instancias hayan sido creadas para ello, lo que a la larga va a representar una complejidad, por más que se diga lo contrario, lo mismo ocurrió con la Sedena, a la cual sacaron de sus cuarteles para desarrollar funciones antinatura para ella, lo que trajo como consecuencia que esté a unos años de regresar a su esencia.

El operativo al cual hacemos referencia, tiene muchas similitudes  con el que hace la Border Patroll en los Estados Unidos, la cual literalmente “caza” a los ilegales que cruzan su frontera, más allá que los mismos busquen asilo político, bueno pues México ya accedió a que su vecino le mande a todos aquellos que pisen suelo americano en búsqueda de asilo, para lo cual, dispondrán de todos los recursos para repatriarlos a sus países de origen, lo que sobra decir nos costará una millonada a todos, pues a pesar que las instancias referidas colaboren en esas funciones de asegurar o rescatar migrantes, estos tienen que ser canalizados al Instituto Nacional de Migración (INM), mismo que seguramente no cuenta con la infraestructura suficiente para contener la enorme cantidad de personas que ya están siendo aseguradas desde que se giró dicha instrucción.

No cabe duda que Donald Trump debe estar contento por todo lo que está haciendo México por su exitoso arranque de campaña rumbo a la reelección, pues no solamente le funcionó la amenaza arancelaria, sino que también, el Gobierno federal está deteniendo a cuánto migrante se encuentran en los estados que colindan con la frontera sur y por si fuera poco, anunció el Ejecutivo el envío de 20 millones de dólares a Centroamérica para generar la infraestructura necesaria para que dejen de buscar el «sueño americano», como si no existieran ya las necesidades suficientes en varias entidades del país en temas de pobreza, sequía, daños por lluvias e inseguridad; ojalá que los resultados de todo lo que se está haciendo le agraden al hombre más poderoso del mundo, caso contrario, menudo problema en el que se habrá metido la «4T», pensando que con ello lo mantendremos contento al inestable Presidente del vecino país del norte… ¡Qué ilusos somos!

Twitter: @dionelsena