Por: Dionel Sena

A punto de que se den a conocer las definiciones del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en cuanto a que hombres y que mujeres serán sus candidatos dentro de la coalición «Va Por Durango», en las diputaciones locales que ya le fueron sigladas al tricolor, es innegable que después de esa depuración de donde saldrán los ungidos, habrá quienes no van a quedar conformes con la definición y lo más seguro, es que no aceptarán su destino, por lo que bien cabe la posibilidad de que en ese pataleo, pudieran ser objeto de un acto de seducción política por parte de los llamados partidos «morralla», es decir, aquellos que elección tras elección, lo único que buscan es mantener el registro a como dé lugar y es ahí, en donde algunos expriistas pudieran tener cabida.

Claro que lo anterior no sería nuevo, pues en los últimos años esa ha sido una constante y no tendría por qué ser la excepción en una elección donde se van a renovar las 25 curules en la próxima Legislatura local y las cuatro diputaciones federales, es tal el valor agregado que pudieran tener estos cuadros que incluso por el trabajo que tienen y el nombre que se han ganado dentro de las filas del PRI, bien pudieran llegar pidiendo hasta una candidatura para una diputación federal, más allá de que las posibilidades de victoria serían mínimas, si no es que imposibles, en especial por la complejidad que tendrá la elección venidera, en donde todo apunta a una polarización del voto y es ahí en donde podrían sufrir de sobremanera los partidos sin estructura y con poca militancia.

Se debe recordar que hay varios tiradores y tiradoras en los distritos 2 y 15 del Revolucionario Institucional, en donde difícilmente todos van a tener cabida, de ahí el que se piense que los que no sean los ungidos o ungidas, pudieran terminar volteando para otro lado e irse con el canto de las sirenas, buscando una aventura electoral que difícilmente se va a cristalizar, sin embargo, sí pudieran ser abanderados de aquellos partidos que a lo único que aspiran es a mantener las prerrogativas, privilegios a los que no muchos están dispuestos a renunciar, por lo que aquellos priistas jóvenes, principalmente, deberán ser muy conscientes de las decisiones que toman, no vaya a ser que a la vuelta de los días se arrepientan de irse del partido que los vio nacer políticamente hablando.

Lo más seguro es que Luis Enrique Benítez Ojeda, Roberto Padilla Márquez y Arturo Yáñez Cuellar, están conscientes de la posibilidad de que un éxodo de cuadros jóvenes del priismo pudieron emprender el vuelo a otras ofertas políticas, por lo que deberán mandar el mensaje adecuado para aconsejarles que el hecho de que se haya registrado una coalición con el PAN y el PRD, indudablemente que redujo de manera exponencial el número de espacios a repartir, algo que deberán madurar los aspirantes, muslos que a la vuelta de algunos meses y si mandan el mensaje adecuado de institucionalidad, ese gesto les pudieron ser compensado antes de lo que ellos mismos piensan y ejemplos hay muchos dentro de ese partido político. 

Por: Dionel Sena

@dionelsena