Por: Dionel Sena

Finalmente el Tribunal Estatal Electoral tomó la decisión de “palomear” los resultados electorales en los municipios de Lerdo, Tamazula y Súchil -por mencionar a algunos-, después que no encontrara elementos de peso para que las impugnaciones referidas transitaran, por lo que decidió darles “palo” y ratificar lo que el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) ya había validado en dichos comicios, es decir, los triunfos del PRI y de la coalición PAN-PRD, mismos que con ello ratifican el bipartidismo que se dio en las elecciones del pasado 2 de junio, y lo que no deja de ser un mensaje de la mayoría de los duranguenses que salieron a sufragar, lo que marcará la tónica política-electoral en Durango hasta el 2021, año en el que una vez más, se renovarán el Congreso del Estado y la Cámara de Diputados federales. 

Uno de los asuntos que más llamaban la atención de la sesión de ayer en el tribunal referido, era sin duda Lerdo, el único municipio de los tres grandes -de mayor densidad poblacional- de todo el estado, en donde el Revolucionario Institucional pudo ganar con Homero Martínez, el cual, según los órganos electorales en el estado, venció de manera legítima al morenista Fernando Ulises Adame de León, quien debido a lo cerrado de la contienda decidió interponer un recurso de impugnación, mismo que al menos en las instancias locales no caminó, por lo que no se descarta que en los próximos cuatro días, lleve el tema hasta la Sala Regional de Guadalajara con la esperanza que le acepten los argumentos, mismos que los magistrados del Tribunal Estatal Electoral no vieron con la contundencia debida como para cambiar el curso de la historia, y en especial la forma y el sentido en el que votaron los habitantes de esa zona limítrofe, mismos que refrendaron al mismo partido que ganó tres años atrás, más allá de que María Luisa González Achem jugó en esta ocasión para otro lado.

Se debe aclarar que entre las causales que argumentaba el aspirante de Morena en el caso de Lerdo, destacan la nulidad de casillas y por ende de la elección total, por haberse violentado la cadena de custodia de los paquetes electorales, existir posible alteración de paquetes electorales, reducción de 25 días de campaña electoral, conteo de sufragios inadecuados, entre varias situaciones más, mismas que como ya se comentó, ninguna causal se acreditó por no existir medios de convicción adecuados, suficientes y contundentes; por lo que casi es un hecho que lo mismo dictamine la Sala Regional de Guadalajara.

En lo referente a Súchil y Tamazula, ahí triunfaron en las urnas Abel Santoyo Salas y José Ángel Beltrán Félix, el primero abanderando al PAN y al PRD, mientras que el segundo al PRI, sin embargo, en ambos casos, se les acusó de haber rebasado el tope de gastos de campaña, lo que desde luego no pudieron acreditar con la contundencia debida, razón por la cual el Tribunal Estatal Electoral decidió ratificar la voluntad de los habitantes de ambos municipios que salieron a votar, sin embargo, tendrán aún la posibilidad -los inconformes- de recurrir a la otra instancia regional.

Cabe señalar que en Guadalajara también está el recurso de impugnación que el PRI interpuso en torno a la elección en Poanas, en donde el alcalde electo José Luis Valdez Valenciano, de Movimiento Ciudadano, -según los priistas- habría falsificado documentos para acreditar su candidatura, por lo que el tricolor solicitaba no sólo la nulidad de esos comicios, sino también que el segundo lugar en la votación -o sea ellos- fueran los ganadores de la contienda, a lo que el Tribunal Estatal respondió que no y valorando la eficiencia que ha tenido ese órgano que fue capaz de resolver todos los medios de impugnación con 22 días de antelación antes de la fecha límite, dicen los que saben que es poco probable que les corrijan la plana en éste o en cualquier otro medio de impugnación que llegue hasta tierras tapatías.

¿Será?… 

Twitter: @dionelsena