El miedo de la mujer a la violencia del hombre es el espejo del miedo del hombre a la mujer sin miedo: Eduardo Galeano

Por: María de Lourdes López Salas

La violencia en cualquiera expresión y contra quien sea, no puede ser aceptada y muchos menos ocultada. Es necesario que se denuncien estas acciones que lastiman a cualquier persona.

Eso fue precisamente lo que sucedió el viernes 7 de mayo, cuando la maestra Dora Ivone Rosales Sotelo, comisionada del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE), en la presentación del del libro “Equidad de género en el acceso a la información”, denunció una serie de actos de misoginia y violencia ejercidos por “sus compañeros” comisionados quienes en un acto de “poder” no solo la destituyeron como presidenta, sino que se han dedicado a denostarla y agredirla verbalmente.

De ninguna se puede aceptar la violencia y menos hacia una persona que pertenece a un organismo que se dedica a garantizar y defender los derechos humanos de acceso a la información y la protección de datos personales.

Desgraciadamente, la violencia de género al interior de los órganos garantes de la transparencia no es novedad, la gran diferencia es que hoy se está haciendo público, al igual que en su momento la excomisionada de transparencia de Tlaxcala denunció algo similar en el año 2018, cuando sus compañeros comisionados (hombres) intentaron destituirla, la violentaron verbalmente incluso en algunos eventos del Sistema Nacional de Transparencia.

Hoy, por fortuna la situación es diferente la reacción del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), que encabeza y preside el Sistema Nacional de Transparencia, se pronunció rechazando la violencia en contra de la comisionada Dora Ivone Sotelo, en la sesión pública de la semana pasada.

El hecho de que la presidenta del INAI, la comisionada Blanca Lilia Ibarra Cadena haya sido sensible ante este acto reproblable, al igual que las otras comisionadas y comisionados Julieta del Río, Josefina Román, Oscar Guerra, Eugenio Monterrey, Adrián Alcalá y Francisco Acuña, es el reflejo de la preocupación y ocupación sobre el tema de la violencia en contra de una comisionada.

El mensaje es fuerte y claro, pero sobre todo debe ser ejemplo para el resto de los órganos garantes del país, porque se destaca que no pueden y deben ser tolerados estos incidentes de violencia.

Sobresale la congruencia al señalar que no se puede por un lado promover en todo el país entre los sujetos obligados acciones para combatir la violencia de género y por otro lado quedarse callado ese tipo de acciones.

El gran problema que prevalece es que en el ámbito de los órganos garantes aún predomina la cultura machista, la falta de respeto entre pares es decir entre comisionadas y comisionados quienes al ocupar la presidencia de ese órgano se ha usado para imponer y no trabajar de manera colegiada, o incluso para actuar de manera facciosa para permanecer en dicha presidencia marginando a mujeres.

El asunto trascendió al grado que comisionadas y excomisionadas de transparencia del país, a invitación de la excomisionada Bibiana Peralta que conduce el programa “La Lupa” transmitido por Facebook Live, el jueves pasado manifestaron su solidaridad total y apoyo a la comisionada Dora Ivone, e hicieron una serie de propuestas para fortalecer la labor que se realiza en el Sistema Nacional de Transparencia a favor del género.

Twitter: @lululopezsalas