Por: Primitivo Ríos

El confinamiento realmente inexistente, la carencia de apoyos a los ciudadanos afectados por la pandemia con impacto real por parte de la autoridad municipal encabezada por Jorge Salum, el desbordamiento de la movilidad social en busca de ingresos para poder sobrevivir ante la crisis económica, están generando un incremento superlativo en el número de contagios y, lamentablemente también, en el número de fallecimientos.

Esta grave circunstancia no debe ser ignorada por el Presidente municipal, pues en los próximos días el Cabildo capitalino deberá aprobar los proyectos de la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos para el ejercicio fiscal 2021.

La recaudación de impuestos y el cobro de servicios, así como su aplicación en obras, servicios y programas sociales son de incumbencia pública pues son los ciudadanos quienes al final de cuentas le dan soporte financiero al Gobierno municipal.

No se trata entonces, de un tema que tenga que ver solo con el Cabildo, con los regidores panistas o con el Alcalde, pues esta discusión y decisión debe abrirse al pueblo y crear los espacios para que en plena libertad y ejercicio democrático verdadero, la gente exprese sus puntos de vista que permitan al Municipio caminar junto al pueblo. No hacerlo es proceder con autoritarismo y antidemocracia.

El próximo año, Jorge Salum no debe aumentar impuestos ni crear nuevos, debe recuperar los cuantiosos millones de pesos robados por los servidores públicos de administraciones anteriores, principalmente por José Ramón Enríquez; los funcionarios de primer nivel del actual gabinete municipal deben bajarse el salario ya que los altísimos salarios que perciben son un insulto para la gente que apenas tiene para sobrevivir, no se puede continuar despojando a la población imponiéndoles multas abiertamente injustificadas, lo que ha propiciado un profundo humor social altamente negativo. Se debe gobernar desde la sana austeridad, sin derroche, sin corrupción y con rendición de cuentas plenas y verdaderas.

El presupuesto deberá direccionarse a otorgar apoyo real a los sectores más golpeados por la pandemia del COVID-19, destinar recursos suficientes para promover la recuperación y generación de empleos. Actualmente la Dirección de Fomento Económico Municipal tiene un presupuesto de diez millones de pesos totalmente insuficiente para promover la reactivación económica, en tanto la Dirección de Servicios Públicos municipales tiene asignado en este año la excesiva cantidad de 500 millones de pesos. El dinero público que es desviado para las campañas electorales por el “PRIAN”, sale de esta dirección.

Urge destinar mayores recursos para avanzar en la construcción e instalación del drenaje pluvial en la ciudad para evitar daños y pérdidas al patrimonio familiar a consecuencia de las inundaciones recurrentes año tras año. De igual manera atender el justo malestar y demanda social para contar con pavimento de calidad en las calles de sus colonias, fraccionamientos, centros habitacionales.

El Presidente municipal debe y puede ponerse a mano con Durango. El presupuesto debe redireccionarse para atender las necesidades más apremiantes del pueblo.

Twitter: @Primitivo_Rios