El maravilloso escritor, nacido en Durango, José Revueltas cumple hoy 44 años de haber partido físicamente pero su legado artístico permanece eterno e imborrable.

El 14 de abril de 1976 partió la vida mortal del ingenioso escritor pero nació su leyenda, José formó parte de una de las familias más reconocidas de Durango, la familia de artistas de los Revueltas.

José Revueltas fue guionista, escritor, poeta y siempre se mantuvo firme en no ignorar las desigualdades sociales y la injusticia como hecho verídico de la realidad mexicana.

Su nombre completo fue José Maximiliano Revueltas Sánchez y su familia que se compuso por doce hermanos, gozó de cierta holgura económica gracias a la tienda «el Naranjo» de su padre José Revueltas Gutierrez.

Los padres de la leyenda, José y Romana, no querían que sus hijos fueran comerciantes por lo que inculcaron en sus hijos el benéfico y maravilloso gusto por la lectura, de esto resultaron excelentes dividendos por algunos de los hermanos Revueltas sobresalieron tanto que se convirtieron en la familia de artistas duranguenses más conocida.

Fermín Revueltas fue un gran pintor y muralista, se le atribuye colaborar en el inicio del gran periodo conocido como el muralismo mexicano.

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Rosaura Revueltas fue escritora, bailarina y actriz, y puso a las artes del movimiento en Durango como reconocidas y de calidad a nivel nacional.

Silvestre Revueltas es también de muy destacada huella, al ser muy importante músico y compositor.

José Revueltas por su parte destacó de manera soberbia como escritor y activista político.

En 1929 fue detenido en el Zócalo de la Ciudad de México porque izó una bandera roja en el asta, manifestaba sus pensamientos comunistas.

Es considerado por las autoridades uno de los autores intelectuales del movimiento del 68 por lo que fue arrestado en su momento.

A su muerte se le rindió un homenaje en la Universidad Autónoma de México, en lugar de guardar un minuto de silencio como es costumbre, el orador pidió un minuto de aplausos, para alguien que nunca encontró refugio en el silencio.