Semilleros creativos 7 de junio

Encuentro
Elvira Martínez Galindo
Mi palacio
se hunde en silencio,
en sombra hueca
la magia
son tinieblas,
mi ternura
eleva plegaria
a la tristeza,
lo profético
decapita mi inocencia.
Cualquier intento
resulta inútil,
el alma solo anuncia
terrible angustia,
nada importa,
todo son presagios
desfavorables,
sacrificios sin sustento.
La oscuridad
me frecuenta,
de sus grietas
brotan fantasmas
tinieblas
húmedas y frías,
y la noche
me reúne con la muerte.
El mar
Elvira Martínez Galindo
Cuando no tienes tiempo,
¿Cómo lo gastas en tonterías?
¿Cómo regresas?
Al mar que has olvidado
¿Cómo medir en tu cerebro?
Que tan inteligente eres.
Mis estanques
se han secado,
me traiciona
el optimismo
de regresar
a un mar que he olvidado.
Mi deseo
es un viento fuerte,
el destino
jamás me contradice,
mis ojos se inundan
por el dolor,
sobre el campo
deje el alma destrozada,
me susurra la mirada
busca tu redención
el tiempo está en tu mano
vive
regresa
al mar olvidado.