Guadalupe y Calvo. – Según versiones desplazaron grupos armados en diferentes regiones serranas a 56 personas.

Mismas quienes sufrieron desde la quema de sus hogares, robo de pertenencias y hasta agresiones sexuales del tipo violación.

Posteriormente los afectados tuvieron que buscar refugio en otra localidad, y hasta la fecha siguen sin poder regresar a sus hogares.

Fue el pasado mes de junio cuando los hechos anteriormente mencionados tuvieron lugar en las comunidades de Santa Cruz, Puerto Amarillo, Ángeles, Sahuarare y Sitanachi; Comunidades que pertenecen a Gpe y Calvo y Morelos.

En los sitios anteriormente mencionados al menos 56 personas fueron despojadas y desplazadas forzosamente de sus hogares; por grupos de personas armadas que se encuentran relacionadas en el crimen organizado, según señalan.

Inicialmente los hechos sucedieron en el mes de junio, pero no se tuvo conocimiento si no hasta finales del mes de agosto; ello derivado del miedo que sufrieron los afectados una vez que fueron obligados mediante la violencia a dejar sus hogares.

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Según la carpeta de investigación que se obtuvo por medio de la Fiscalía Zona Sur del Estado; los afectados son en su mayoría pertenecientes a los pueblos originarios; se habla de familias enteras y hasta personas de única procedencia por hogar.

Entre los abusos que sufrieron, esta que fueron sacados violentamente y de golpe de las casas habitación donde se encontraban; mismas de las que incluso quemaron algunas, así como también sufrieron robo de sus pertenencias personales y hasta agresiones sexuales del tipo violación.

A lo anterior se suma que sus tierras se perdieron, siendo este el principal motivo por el que fueron despojados.

Extraoficialmente se supo que, al llevar un estilo de vida alejados de las demás comunidades por las difíciles rutas de acceso entre ellas; intentaron avizorar un regreso a sus hogares luego de que fueran despojados de estos.E

Entre los montes, pinos y piedras buscaron caminos para identificar si los grupos armados se habían retirado de sus tierras, sin embargo, estos nunca se fueron.

Tras lo sucedido la Comisión Estatal de Pueblos Indígenas (COPEI), así como también la Comisión Ejecutiva de Atención a Victimas del Estado (CEAVE); tras enterarse de los hechos acudieron para brindar apoyo a los afectados; en donde se avocaron a levantar un censo del número de habitantes que fueron despojados incluyendo las necesidades más apremiantes que tenían en el momento.

Entre los apoyos que se otorgaron se encuentran sacos de frijol, maíz y cobijas.

Incluso un medico integrante de las comisiones que acudieron, realizo tanto valoraciones como evaluaciones identificando que de entre los afectados; hubo quienes padecían de diabetes e hipertensión; a ellos les fue otorgado medicamento por un lapso de 3 meses para tratar sus padecimientos; ya que lo único con lo que pudieron salir de sus hogares fue con lo que traían puesto.

Cabe mencionar que hasta el momento y por seguridad de los agraviados; no se puede indagar el lugar en el cual encontraron refugio, pero si, que se encuentran asentados temporalmente en otro lugar.