Vicente Guerrero, Durango.-La Línea Amarilla es uno de los mecanismos que ha puesto a disposición la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) del Estado, para la prevención del suicidio.

Cada vez se considera más como uno de los mayores problemas de salud publica a nivel mundial. Llegando a alarmantes cifras globales donde se han superado las 703 mil personas que se quitan la vida por año, en datos recientes.

Lo que corresponde a una aterradora muerte casi cada 40 segundos, según datos de la OMS. Para esta afectación, como en cada padecimiento, hay señales para tener a consideración e indicativos que pueden ponerte alerta, como los siguientes:

• Insomnio o dormir mucho.
• Irritabilidad.
• Aislamiento.
• Llanto incontrolable.
• Consumo de sustancias recurrentes.

Actitudes como esa se denotan si se tiene una tendencia de pensamientos suicida o se identifica en alguna persona cercana, con gestos, platica o comentarios muy recurrentes como; ´estaría mejor muerto´, ´quisiera dormir y nunca despertar´, ´no quiero ser una carga´ o ´ya no quiero vivir´.

Así mismo, se pude notar en ser muy autocrítico o auto humillarse, descuido en higiene o imagen personal, bajones recurrentes de ánimo, despedirse de forma muy efusiva, hasta pequeños detalles como eliminar redes sociales con frecuencia.

Teniendo todo eso en cuenta, se pueden realizar múltiples acciones: De entrada, como mínimo buscar ayuda directa en personas de demasiada confianza o el apoyo de profesionales, escuchar de forma activa en los pensamientos propios o del afectado.

Con una buena efectividad e incluso impacto en la región, la Línea Amarilla, busca salvar la vida de aquellas personas que están al límite, de la mano de profesionales de la salud mental. Al comunicarse al 911, también hacen una llamada a la vida.

Por: Manuel Amador