Hay ciudadanos que han sido estafados por sacerdotes piratas, que se aprovechan de la ignorancia de los feligreses católicos y operan, sobre todo, en la periferia de la ciudad. Se detectó a dos personas que ofrecían los sacramentos y cobraban por ello, sin embargo, el representante de la iglesia católica en el consejo inter religioso nos hizo saber que esas dos personas están suspendidas, por lo que usurpan funciones, señaló Juan Carlos Gutiérrez Fragoso, director de asuntos religiosos de la secretaría general de gobierno.

El entrevistado precisó que quienes se hacen pasar por sacerdotes buscan cobrarle a la gente por sus servicios, como un bautizo, una misa o algo parecido. Hay que decir que esto no es un delito que se persiga de oficio y por eso los afectados tienen que poner las denuncias correspondientes.

Explicó que estas personas que se hacen pasar por sacerdotes en Durango, usurpan funciones porque ellos fueron suspendidos por el Tribunal Eclesiástico. Los usurpadores se movían más por las colonias de la periferia en la capital, porque lamentablemente se aprovechan del desconocimiento de la gente y de su situación. Pero, insistió en que esto no es competencia de la dirección de asuntos religiosos, porque al “pertenecer” a la iglesia católica, el tema está en su jurisdicción, concluyó.

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Por: Brenda Maurer