“Durango vive una tensa calma porque, particularmente, en el municipio de Canatlán, el INIFAP tiene un predio de 25 hectáreas que usan como campos experimentales, pero resulta, que, hace unos días, llegaron unos hombres armados que corrieron a los trabajadores y se están metiendo al terreno. El secretario general de gobierno ya tiene conocimiento de esto porque es un tema de seguridad y deben actuar”, expuso el dirigente estatal de la Organización de Defensa Campesina (ODC), Gustavo Pedro Cortés.
El dirigente dijo que este tema es de seguridad para el INIFAP y los vecinos; esto ya se hizo del conocimiento del gobierno federal, pero hasta ahora no han tenido reacciones. “Vale la pena que el Gobierno del Estado intervenga para contener esta situación, mientras se aclara a plenitud el asunto, pero si llegan armados que no son policías, pues los trabajadores del INIFAP, no pueden hacer nada. Además, ¿quién se atreve a poner una denuncia? Por eso se requiere que la autoridad ponga orden”.
Al preguntarle si el Plan Nacional de Seguridad, permitirá que estas cosas ya no ocurran, el líder campesino, indicó que hay muchos temas que no son del conocimiento del gobierno federal, pero una vez que se hizo del conocimiento del Secretario General de gobierno del Estado, lo que esperan es que actúen, concluyó Gustavo Pedro.
Por Brenda Maurer
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