Por: Víctor Salas
Los habitantes de El Salto, Pueblo Nuevo, denunciaron la situación del agua que se consume en el municipio, mencionaron que no es potable y eso puede repercutir en su salud, piden una solución inmediata.
En base a la investigación realizada sobre dicho proyecto que se ejecutó en la administración municipal que encabezó José Guadalupe Barrios, hace varios años se da a conocer que para la planta potabilizadora de agua se realizó una inversión de 34 millones 897 mil pesos, la construcción de dos macrotanques elevados y la sectorización de las líneas de agua potable, sin embargo, tal parece que dicha planta potabilizadora no brindó la función ni el servicio de agua de calidad para los habitantes y esto ha ocasionado molestia con los ciudadanos.
Sobre este tema, Adrian Esquivel Medrano, director de Comunicación Social aseguró que de la presa la Rosilla II se envía el agua a la planta potabilizadora pero desafortunadamente no hay recurso que alcance con las finanzas en el Sistema Descentralizado de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento (Sideapas) y no se cuenta con todos los químicos para poder tener el agua limpia, se requiere de sulfato de aluminio y gas cloro para llevar a cabo un tratamiento que definitivamente se realiza pero los químicos se terminan pronto y esto ocasiona afectaciones, afirmó.
Esquivel Medrano dijo que se trata de “agua rodada”, lamentablemente en El Salto, Pueblo Nuevo no hay pozos como en Durango y es por ello que de la presa se envía el agua a la planta potabilizadora y en ese lugar se le da tratamiento pero no está del todo purificada.