Por: Harimm García
Rogelio Soto Ochoa, presidente de la Unión Regional Ganadera de Durango (URGD), señaló que la reapertura de las fronteras para la exportación de ganado es buena, pues se han dejado de exportar 75 mil cabezas de ganado desde el primer caso de gusano barrenador, ahora solo queda conocer la dinámica de exportación y por dónde podrá trabajar Durango, pues es el único estado exportador que no cuenta con frontera.
“Afortunadamente, el Departamento de Agricultura de Estado Unidos (USDA) y Senasica llegan a un acuerdo, recordándoles que en dos ocasiones se mandó el protocolo como tal a USDA y fue rechazado, afortunadamente el día de ayer se llega a un acuerdo, lo vamos a conocer oficialmente en el transcurso del día, anoche se mandó en el idioma inglés y hay que traducirlo y sobre todo esperar que Senasica lo haga oficial, siempre hemos sido respetuoso en esto para no crear especulaciones”, explicó.
“Ahora que sale el protocolo, lo que más tenemos entendido es que vienen adecuaciones a las cuarentenarias para poder cruzar el ganado hacia Estados Unidos y serán las tres cuarentenarias de Chihuahua y las dos de Sonora las que estén autorizadas por tener supervisión del lado mexicano, la buena noticia es que también Coahuila probablemente logre su reapertura pronto, lleva buenos avances. A finales de año esperemos que ya esté cruzando el primer ganado y esperemos que las fronteras de Chihuahua consideren a Durango porque somos el único Estado que exporta y no tiene un cruce fronterizo”, agregó.
Soto Ochoa consideró que la reapertura de las fronteras para la exportación mantendrá el precio del ganado, el cual, en pasados días comentó que había bajado un 50 por ciento, en aquella declaración también hizo el llamado a los ganaderos para no vender sus cabezas de ganado, llamado que dijo llegó a muchos y ahora solo deben permanecer al menos otras dos semanas sin vender para que logren exportar a Estados Unidos.
El presidente de la Unión recalcó que tanto los ganaderos como las autoridades mexicanas deberán ser estrictos y respetuosos de los protocolos, guardar la cuarentena, no pasar ganado lastimado o con heridas expuestas, no brincarse los registros sanitarios, entre muchos otros detalles que solicitan las autoridades para evitar que el gusano barrenador siga afectando al ganado mexicano y cause perjuicio en Estados Unidos.
Es importante recordar que la infestación del gusano barrenador provoca estrés, pérdida de apetito y dolor en los animales, lo que lleva a una disminución en la producción de carne y leche, lo que se traduce en importantes pérdidas económicas.
Te sugerimos leer: Estrategia Vive y Línea Amarilla previenen suicidios y trabajan en detectar zonas de alto riesgo: SGG.