Súchil, Durango.- Un abuelito atestiguó que su esposa perdía la vida, al parecer por las complicaciones de una enfermedad, pero la autoridad investiga.

El abuelito, que atestiguó que su esposa moría, es quien proporcionó la información a las autoridades locales.

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Lo que se conoce del lamentable y triste acontecimiento, es que ocurrió durante la tarde del miércoles, en un domicilio de Súchil, Durango.

El matrimonio, que se disolvió con el fallecimiento de la abuelita, lo formaron por muchos años doña Juana de Dios Chávez Montes y don Martiniano Bermúdez García.

Ella, de 79 años de edad, y él, de 78, durante décadas vivieron en la calle Independencia, de la cabecera municipal de Súchil.

Durante los últimos años, doña Juana de Dios la aquejaron las enfermedades crónico-degenerativas propias de su edad.

Aunque ella recibía las atenciones necesarias por parte de los médicos, conforme pasaba el tiempo se agravaban.

Fue la tarde del miércoles cuando la adulta mayor pasó a mejor vida, por lo que se dio aviso al personal de la Fiscalía General del Estado (FGE).

Poco después llegó el gabinete de la institución, platicó con don Martiniano, y les dio la información que le pidieron.

Posteriormente, realizaron las diligencias y estudios propios de casos como este, para determinar la causa del deceso.

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