Condenado a 360 años de prisión se ahorcó en su celda, hechos ocurridos durante la tarde de ayer sábado.

Quien condenado a 360 años de prisión se ahorcó en su celda, era originario de Honduras y  antes se cortó las venas de ambos brazos, como para asegurarse de morir,

Pedro Antonio Vargas Castillo, era el nombre de quien se convirtió en el suicida número 11 del mes de septiembre y el 127 en lo que va del año 2024.

De entre lo poco que se sabe del caso, el recluso de 30 años de edad, se encontraba confinado en el Centro Federal de Reinserción Social (Cefereso), número 14, ubicado en Gómez Palacio, Durango.

Condenado por el delito de secuestro agravado a 360 años de prisión, se cree que, el hombre sufría depresión, al pensar que jamás saldría con vida.

Poco después de las 12:00 horas de hoy, un elemento de seguridad recorría su área a manera de vigilancia, cuando al asomarse a la celda del hondureño, lo observó colgado con una sábana, además que sangraba de los brazos.

Rápidamente solicitó ayuda a la superioridad, abrieron la celda y lo bajaron, para de inmediato llevarlo a la enfermería, pero aunque trataron de reanimarlo, ya no contaba con signos vitales.

Ante lo anterior, avisaron a la Vicefiscalía de la Laguna, llegó el personal para realizar las diligencias correspondientes, levantar el cuerpo y trasladarlo al anfiteatro, donde se le practicaría la necropsia de ley.

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