Durango, Dgo.- Le pidieron rescate para liberar a su sobrino, pero al reportar el caso a la policía, se descubrió que se trataba de una extorsión telefónica.

Fue en un poblado de Durango, donde le pidieron rescate para liberar a su sobrino, pero se trataba de un intento de extorsión.

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Las autoridades tomaron conocimiento del caso, cuando el señor Juan Pedro, vecino del poblado 5 de Mayo, llamó al número de emergencias 911.

Él comentó que le llamó a su teléfono celular un sujeto, quien le aseguró que tenía secuestrado a su sobrino y que si lo quería volver a ver, requería que le depositara 30 mil pesos.

Muy preocupado, el señor Juan Pedro le marcó a su sobrino, pero al no responderle creyó que en verdad estaba secuestrado.

Por esa razón, la siguiente vez que le llamaron los «secuestradores» les dijo que solo tenía 10 mil pesos y le manifestaron que los depositara.

La realidad no se sabe si lo hizo o no, porque luego intervinieron las corporaciones policiacas, las que normalmente al enterarse de que se trata de un engaño o intento de extorsión, les aconsejan que no entreguen ni un centavo.

Este tipo de casos ocurren, porque muchas personas no hacen caso a las recomendaciones que hace la autoridad, en cuanto a que no respondan a las llamadas de números desconocidos.

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